

Los resultados de la creación de empleo registrado de enero, que informó ayer el Ministerio de Trabajo, no fueron una buena noticia para la administración nacional: la variación mensual, tanto en términos absolutos como desestacionalizados, registró caídas en la cantidad de empleados y arrojó de los peores resultados de la gestión de Mauricio Macri.
En la comparación interanual, el total de trabajadores registrados subió 1,7% en enero. Y si bien sigue siendo un dato positivo mantiene la tendencia a la desaceleración que se evidenció, tras los picos de septiembre y octubre, en el último trimestre de 2017.
Según el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), la serie más completa de empleo registrado en el país, en enero se registraron 12.299.700 trabajadores en la Argentina, entre los que se cuentan a 8.713.400 trabajadores del sector privado, los 3.167.300 empleados estatales de todos los niveles de gobierno y 419.000 monotributistas sociales. En el desagregado del sector privado se cuentan 6.297.800 trabajadores en relación de dependencia; 1.555.800 monotributistas; 468.700 de casas particulares y 391.100 autónomos.
Al comparar los resultados de enero contra diciembre 2017, la variación absoluta arroja un baja de 0,3% o 40.000 trabajadores menos. La variación mensual en términos desestacionalizados también arroja un retroceso, pero de 0,1% o 13.800 trabajadores totales menos.
Si se mira la evolución del sector privado solamente, Trabajo registró en enero una caída de 23.800 empleados contra diciembre. De ellos, 14.300 fueron monotributistas que se bajaron del régimen o dejaron de pagar en los últimos tres meses; 4100 fueron despidos de trabajadores en relación de dependencia; 900 empleadas de casas particulares menos y 4500 los autónomos que dejaron de aportar como tales a esa categoría impositiva.
Focalizando aún más la mirada, el dato negativo de los 4100 trabajadores menos en relación de dependencia del sector privado es el peor desde abril del año pasado, cuando se había registrado una destrucción neta de 4200 puestos de trabajo.
El rubro con más despidos en términos relativos a la cantidad de trabajadores totales de su sector fue Servicios comunitarios, sociales y personales, que registró una caída de 0,6%, seguido por Hoteles y restaurantes (baja de 0,4%); y Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (0,3%).












