El vicepresidente Amado Boudou atribuyó al duhaldismo y al grupo Boldt las denuncias que lo vinculan con el levantamiento de la quiebra de la ex Calcográfica Ciccone y se mostró confiado en que la Justicia va a determinar que no tiene “nada que ver” con los hechos que se le imputan.

Así, luego de haberse negado en reiteradas oportunidades a realizar declaraciones acerca del caso Ciccone, el vicepresidente decidió levantar la voz en distintos medios gráficos y televisivos para desmentir las acusaciones que se le imputan.

En una entrevista con Página/12, Boudou calificó la denuncia como “una gran mentira” y advirtió que “se están moviendo intereses muy oscuros por detrás de toda esta trama”, en la que también incluyó a los diarios Clarín y La Nación.

Además, dijo que “hasta ahora no había hablado porque es tal la sarta de mentiras que es muy difícil ponerse a desmentir afirmaciones que, de lo propio que uno va leyendo en el tiempo, confunden funcionarios con socios de una empresa, dueños con empleados. Toda una operación construida alrededor de mentiras”.

En ese contexto, el funcionario añadió: “Lo importante es que ahora también tiene un trámite judicial que va a permitir dilucidar las cosas tal como son, que es que yo no tengo nada que ver”.

“Muchas veces peleamos contra poderes ocultos, poderes que se esconden atrás de sectores de la prensa, del trabajo que hace el Grupo Clarín y el diario La Nación utilizándolos a veces para hacer trastadas políticas ­por ejemplo, el duhaldismo y el duhaldismo residual­, a veces para hacer negocios y negociados. Y me estoy refiriendo al grupo Boldt, que está detrás de todo esto”, apuntó en forma directa el vicepresidente durante el reportaje.

Sobre el mismo tema, pero en una entrevista con Ambito Financiero, Boudou recordó que la firma Boldt “es de la familia Tabanelli, cuyo principal operador político es el señor Guillermo Gabella”, y señaló que esa empresa “se ha ido quedando con todo el sistema de juego electrónico en la provincia de Buenos Aires sin ningún tipo de licitación”.

En ese sentido, agregó “fue avanzando sobre cuestiones que el Estado podía hacer, como la impresión de padrones y pasaportes”.

“Lo que estamos viviendo hoy es la recuperación del Estado, de la Casa de la Moneda que ha vuelto a imprimir padrones electorales, papeles de seguridad para Lotería de la Nación. Eran todos negocios que Eduardo Duhalde le fue dando a la empresa Boldt y, por lo tanto, está atrás de toda la operación mediática”, indicó.

Por otra parte, el vicepresidente aseguró que no conoce a Alejandro Vanderbroele, a quien algunos medios le atribuyen ser su testaferro; mientras que sobre José María Núñez Carmona, quien también es nombrado en la denuncia, señaló que tiene “una relación muy estrecha” ya que es “amigo” y “socio”.

En tanto, en el programa oficialista 678, sin nombrarla, pero aludiendo a ella, aseguró que nunca fue novio de Guadalupe Escaray, prima del monotributista Alejandro Vandenbroele, director de la ex Ciccone Calcográfica.