

Mauricio Macri lleva al deporte en las venas. Aunque quedó muy atrás en el tiempo su estadía como presidente de Boca, nunca termina de despegarse de los colores azul y oro. Sin ir más lejos, este lunes acompañó a Andrés Ibarra (candidato de la oposición Xeneize y avalado por él) y en esa presentación de campaña habló del día que Pep Guardiola quiso dirigir al club de la Ribera.
Hace pocos días, fiel a su estilo, logró que su apellido rápidamente se convirtiera en tendencia en las redes sociales, contemplando que apareció junto a Guardiola, al presidente de Manchester City y a otros directivos de alto rango en el duelo entre los Ciudadanos y Real Madrid, correspondiente a las semifinales de la Champions League.
La particularidad, que generó polémica, fue que apareció en una foto luciendo la bufanda de Los Citizens y levantando cuatro dedos, haciendo alusión a las conquistas de los ingleses ante los españoles. Días después, explicó las razones: "Me invitó el presidente, es un gran amigo y fui a acompañarlo. Le dije a Florentino (Pérez) antes de empezar el partido que iba a favor del City, ya ´ustedes el año pasado ganaron una Champions con partidos de Hollywood´", señaló en diálogo con Tyc Sports.
A continuación contó una imperdible anécdota de cuando el entrenador catalán se mostró entusiasmado con la posibilidad de dirigir a Boca. "Cuando Guardiola estaba en el B del Barcelona y se nos fue el Coco Basile recibí un llamado que decía que a Guardiola le encantaría tal vez pensar en Boca. Obviamente no había dirigido nunca en Primera".
Y agregó: "A todo el mundo le tira Boca, sobre todo si es un Boca que transmite seriedad y la verdad es que si había algo de lo que tenía que cuidarme es de la cantidad de técnicos que se me proponían. Donde iba se me tiraban encima porque soñaban con ser técnico de Boca. Por eso me sorprendió que esta vuelta haya habido tanto problema para conseguir un candidato porque la verdad es que Boca es único con todo respeto a nuestros primos. Boca siempre es Boca".
Macri y Guardiola, una relación de larga data
Aunque nació del otro lado del Océano Atlántico, Pep evidencia un atractivo vínculo con la Argentina. No sólo por el amor que le genera Lionel Messi, sino también porque en la última década pisó estas tierras en dos oportunidades.
En 2013 llegó para participar de una disertación futbolística y en 2018 arribó con la intención de tener un contacto con César Luis Menotti. En la primera visita Macri, por ese entonces Jefe de Gobierno Porteño, lo distinguió como "Huésped de Honor de la Ciudad de Buenos Aires".
Pero eso no fue todo. Macri le entregó un diploma durante un encuentro celebrado en la sede de la Usina del Arte, en el barrio de La Boca, con la presencia de 120 alumnos de escuelas públicas porteñas que tuvieron la posibilidad de hacerle preguntas al extécnico de Barcelona. Además, también le obsequiaron un libro que repasa con textos e imágenes la historia del Teatro Colón.













