El video del golazo de Messi en la despedida de Maxi Rodríguez

Lionel Messi no distingue camiseta, país ni competencia: donde juega saca a relucir su mote de "mejor futbolista del mundo". Este sábado, en la despedida de su amigo Maxi Rodríguez, hizo delirar a Rosario con un repertorio imposible de imitar: marcó tres goles, uno de ellos de tiro libre, y se llevó la merecida ovación.

La ciudad que lo vio nacer necesitaba tenerlo en el Coloso Marcelo Bielsa. Los hinchas de Newell´s se ilusionaron cuando le envió el famoso burofax a Barcelona y repitieron expectativa en el momento que se conoció que saldría de Francia.

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Aunque el corazón muchas veces manda en la toma de decisiones, la Pulga comprendió que no era el momento de volver al club de sus amores. Sin embargo, antes de debutar en Inter Miami el destino le hizo un guiño: en el día de su cumpleaños número 36, los hinchas que más lo veneran le regalaron una ovación irrepetible. El capitán de la Selección, a manera de retribución, metió un hat trick.

Si bien no estuvo en las "formaciones confirmadas" de los equipos, el astro apareció como el protagonista top e ingresó al estadio únicamente antes que Maxi Rodríguez, el homenajeado. Recibió el cariño de los fanáticos que se rompieron las palmas y cantaron "Messi tiene lepra". Poco después, llegaron las conquistas.

El primero de la noche fue de tiro libre a los tres minutos de juego. Históricamente las despedidas suelen tener un excesivo protagonismo de los homenajeados, pero Maxi modificó esa tendencia. La pelota parada estaba cerca del área y decidió dejársela a Leo, quien se encargó del resto al clavarla en el ángulo.

El segundo grito de Leo fue picándola sobre Justo Villar, el paraguayo que marcó una época vistiendo la camiseta rojinegra. Y el tercero fue una pared con Leandro Paredes, otro campeón del mundo, para definir con su pierna más hábil con una media vuelta exquisita.

Messi, emocionado en el Marcelo Bielsa

El show no sólo fue de fútbol, sino también ante los micrófonos. En los últimos años Messi se sintió mucho más cómodo con los flashes y volvió a dejarlo en claro: "Es un día hermoso para estar acá y acompañar a la Fiera que es su día. Hacía mucho tiempo que no pasaba un cumpleaños en Rosario, es el primero siendo campeón del mundo. Es especial", comenzó con total soltura.

Para agradecer el cariño popular, contó cómo vive el día a día con la tercera estrella en el escudo de la casaca albiceleste. "Esto no para, es especial y único. Ser campeón del mundo es el sueño de todo futbolista y es lo máximo. Uno va pensando en lo que viene, cuando me toque el momento de dejar el fútbol voy a disfrutar más de todo lo conseguido".