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J.C. Penney continúa con el cierre de más sucursales en Estados Unidos. La cadena, con más de 120 años de historia, ha reducido significativamente su presencia desde que se declaró en bancarrota en 2020.
A pesar de haber sido adquirida por Simon Property Group y Brookfield Asset Management Inc., la empresa enfrenta nuevos cierres de tiendas en distintos estados.
En su momento, J.C. Penney atribuyó la quiebra a la pandemia de COVID-19, que afectó sus operaciones y ventas. Aunque intentó recuperarse con una estrategia de reestructuración, el cierre de sucursales sigue siendo parte de su proceso de ajuste. Ocho establecimientos más dejarán de operar en los próximos meses.
J.C. Penney y su proceso de reestructuración tras la bancarrota
En 2020, J.C. Penney se acogió al Capítulo 11 del Código de Bancarrotas de Estados Unidos, lo que le permitió negociar su deuda y reorganizar su modelo de negocio. Jill Soltau, directora ejecutiva en ese momento, afirmó que antes de la crisis sanitaria la compañía había logrado avances pero no alcanzaron.
Tras la bancarrota, en diciembre de ese mismo año, Simon Property Group y Brookfield Asset Management Inc. adquirieron la empresa con el objetivo de estabilizarla. Recientemente, J.C. Penney anunció una asociación con Forever 21 para crear Catalyst Brands, aunque los nuevos cierres no están relacionados con esta expansión.
Tiendas de J.C. Penney que cerrarán próximamente
Un portavoz de la compañía informó que ocho tiendas cerrarán a mediados de este año. Los cierres obedecen a diversos factores, como el vencimiento de contratos de arrendamiento y cambios en el mercado.
Las sucursales que cerrarán en USA son:
The Shops at Tanforan en San Bruno, California.
The Shops At Northfield en Denver, Colorado.
Pine Ridge Mall en Pocatello, Idaho.
West Ridge Mall en Topeka, Kansas.
Westfield Annapolis Mall en Annapolis, Maryland.
Fox Run Mall en Newington, New Hampshire.
Asheville Mall en Asheville, North Carolina.
Charleston Town Center en Charleston, West Virginia.
Con estos cierres, J.C. Penney continúa ajustando su operación para adaptarse a los desafíos actuales del sector minorista. Aunque la compañía sigue en funcionamiento, la reducción de su número de sucursales marca un cambio en su estrategia a futuro.
