

En una drástica decisión que sacudió el tablero corporativo de Estados Unidos, Elon Musk confirmó lo que muchos ya sospechaban: su mega empresa, la red social X (anteriormente Twitter) se va de California.
El cierre de las oficinas en San Francisco marca un cambio geográfico como político, lo que deja en claro su enojo con el gobernador Gavin Newsom y su acercamiento al texano Greg Abbott.
Elon Musk se enojó con Gavin Newsom y mudó X a Texas
Lo que disparó esta drástica decisión fue una ley que Gavin Newsom impulsó con fuerza: el proyecto AB 1955, pensado para proteger a los estudiantes trans en las escuelas públicas de California. Pero para Elon Musk, esa norma fue demasiado.
"El estado te quitará a tus hijos en California", lanzó el empresario en redes sociales, dejando clara su postura.
Ya en julio, Musk había avisado que estaba listo para mover ficha y llevar las sedes de X y SpaceX fuera de California. Ahora lo hizo oficial. La compañía notificó a sus empleados que el viernes 13 de septiembre de 2024 sería el último día de actividad en la sede de San Francisco, según Techstory.
Con esto, el magnate deja en claro que eligió a Greg Abbott en Texas como su nuevo sociopolítico.

X se fue de San Francisco: la mega empresa de Elon Musk se muda a Texas
Un correo firmado por la CEO de la empresa, Linda Yaccarino, fue la confirmación que nadie quería recibir: las oficinas de San Francisco se cierran. En el mensaje, la directiva explicó que la decisión fue "muy meditada" y que se tomó pensando en lo que es mejor para el futuro de la compañía en Estados Unidos.
Como parte del proceso, se comunicó que:
Varios empleados serán trasladados a la oficina de San José, a 77 kilómetros.
Otro grupo trabajará desde el nuevo espacio compartido con XAl en Palo Alto, a 54 kilómetros.
Se están coordinando opciones de transporte para los empleados más afectados.
Según The New York Times, este no es el primer revés de la empresa. Ya en 2022, X había dejado de pagar el alquiler del edificio en Market Street y hasta llegó a reconvertir algunas oficinas en habitaciones para empleados. El cierre actual parece ser el capítulo final de la relación entre Musk y San Francisco.
Con este movimiento, Elon Musk lanza un mensaje contundente: se enojó con Gavin Newsom, rompe con California y se alinea con Greg Abbott en Texas, en lo que puede leerse como una declaración abierta en medio de un escenario cada vez más politizado en el mundo corporativo.











