Increíble hallazgo científico: descubren el ritual que permitió a esta civilización "revivir el sol" tras una catastrófica erupción volcánica hace 4900 años
Este grupo de investigadores de la Universidad de Copenhague en Dinamarca revelan las antiguas prácticas de esta comunidad neolítica.
A lo largo de la historia, las civilizaciones han recurrido a rituales para enfrentar crisis que ponían en peligro su existencia. Los fenómenos naturales, como eclipses o cambios drásticos en el clima, desafiaban no solo su supervivencia física, sino también sus creencias y formas de vida.
Un ejemplo fascinante de esto ocurrió hace unos 4900 años en la isla de Bornholm, Dinamarca. Allí, comunidades neolíticas llevaron a cabo una práctica espiritual única tras una gran erupción volcánica que oscureció el cielo y enfrió el ambiente, afectando gravemente sus cultivos.
Un estudio de investigadores de la Universidad de Copenhague, liderado por el arqueólogo, Rune Iversen, descubrió recientemente este hallazgo que revela no solo el ingenio de estas comunidades, sino también su conexión simbólica con la naturaleza.
¿Cuál es el ritual de 4900 años para "revivir el sol" que descubrieron los arqueólogos?
Los arqueólogos encontraron más de 600 piedras solares en el sitio de Vasagård, en Bornholm. Estas piedras planas, hechas de pizarra y decoradas con grabados del sol, estaban enterradas junto con huesos de animales, cerámica rota y herramientas de sílex. Todo esto formaba parte de un ritual para pedir la vuelta del sol y mejorar las cosechas.
Gracias a análisis de hielo de Groenlandia y la Antártida, se sabe que el volcán expulsó grandes cantidades de azufre, lo que formó una capa en la atmósfera que bloqueó la luz solar y causó un enfriamiento global. De esta forma lograron descubrir que esta erupción volcánica ocurrió alrededor del año 2900 a. C.
Este periodo fue tan difícil para las comunidades agrícolas que algunos investigadores lo comparan con una erupción posterior, ocurrida en el año 43 a. C., que causó hambre y caos en el Mediterráneo.
¿Qué significa este hallazgo para la arqueología?
El descubrimiento de las piedras solares muestra cómo estas comunidades enfrentaron el impacto de un desastre natural con rituales religiosos. El sol era símbolo de vida y fertilidad, por lo que los agricultores creían que estos sacrificios podían devolver el equilibrio al mundo y garantizar buenas cosechas.
Además, el sitio de Vasagård estaba alineado con los solsticios, lo que refuerza su importancia como lugar de culto al sol. Este tipo de rituales también se relaciona con otras culturas de la época, como los constructores de Stonehenge en Inglaterra, que también veneraban al sol.
Este periodo fue una etapa de grandes cambios en el norte de Europa. Con el tiempo, los rituales con piedras solares fueron reemplazados por otras tradiciones, como la construcción de cercos de madera y templos circulares.
Hoy, las piedras solares están en exhibición en el Museo Nacional de Dinamarca, donde recuerdan la creatividad y resiliencia de estas comunidades frente a desafíos extremos.