

Hervir cáscara de mandarina y clavo de olor es una solución casera muy usada para neutralizar olores intensos, especialmente los que deja la comida frita. Al hervirse en agua, ambos ingredientes liberan aceites esenciales que se expanden por el aire y desplazan los aromas persistentes de la cocina.
Este método se destaca por su efectividad inmediata y porque no enmascara los olores: los neutraliza, dejando un perfume cítrico y especiado más limpio y duradero que muchos ambientadores industriales.
¿Por qué ayuda a eliminar el olor a frito?
El vapor que se genera al hervir cáscara de mandarina y clavo de olor actúa como un difusor natural que absorbe y reemplaza las partículas responsables del olor a aceite recalentado. El clavo aporta un aroma intenso que corta el olor graso, mientras que la mandarina refresca el ambiente.
Por eso se recomienda usarlo justo después de cocinar, cuando los olores quedan impregnados en textiles, cortinas y muebles.
Resulta útil para:
- Eliminar olor a frito y grasa
- Neutralizar aromas fuertes de cocina
- Refrescar ambientes cerrados rápidamente

¿Qué aportan la mandarina y el clavo de olor?
La cáscara de mandarina contiene aceites esenciales con fragancia fresca y estimulante, eficaces para limpiar el aire. El clavo de olor, gracias a su alto contenido de eugenol, aporta propiedades antimicrobianas y un aroma potente que ayuda a purificar el ambiente.
Aunque su uso es únicamente ambiental, esta combinación es una alternativa práctica, económica y natural para mantener la casa libre de olores persistentes sin recurrir a productos químicos.













