

El dólar atraviesa una de sus etapas más frágiles de los últimos años. En un contexto de tensiones geopolíticas, especulaciones sobre el riesgo de una recesión e incertidumbre comercial, la divisa estadounidense cayó a su nivel más bajo en tres años frente a otras monedas.
Los indicios de desaceleración en la economía de Estados Unidos, de la mano de los recientes aranceles "recíprocos" establecidos por el presidente Donald Trump y la creciente inestabilidad internacional, hacen que muchos empiecen a cuestionar la fortaleza del billete verde como refugio financiero.
Mientras tanto, un viejo conocido del mercado vuelve a destacar como alternativa sólida. El oro, históricamente utilizado para protegerse de las crisis, no solo resistió la caída del dólar: lo superó, alcanzando su precio más alto en la historia reciente.

¿Por qué esta inversión ya le está ganando al dólar?
El precio del oro superó los 3,330 dólares por onza, impulsado por un cóctel de factores que debilitan al dólar. Entre ellos, se destacan el conflicto comercial entre Estados Unidos y China, la caída en la confianza del mercado y la expectativa de tasas de interés más bajas.
La reciente decisión del gobierno estadounidense de revisar los aranceles sobre importaciones estratégicas reavivó los temores de una guerra comercial prolongada. Esto generó una salida de capitales desde activos vinculados al dólar hacia inversiones más seguras.
En ese escenario, el oro volvió a posicionarse como una inversión estrella. Su independencia frente a los vaivenes del sistema financiero lo convierte en una opción preferida tanto para grandes fortunas como para pequeños inversores.

Las formas más elegidas para invertir en esta alternativa hoy en Estados Unidos
Con un precio que no deja de subir y una economía que aún genera dudas, cada vez más personas consideran al oro como una alternativa para diversificar sus ahorros.
Algunas de las opciones más populares para invertir en oro desde Estados Unidos actualmente son:
Cuentas IRA de oro: permiten adquirir oro físico dentro de un plan de retiro, con beneficios impositivos y cobertura frente a la inflación.
Lingotes y monedas: ofrecen liquidez, resguardo tangible y protección ante la pérdida de valor del dólar.
ETFs o fondos respaldados en oro: ideales para quienes buscan exposición al oro sin la logística del almacenamiento físico.
Invertir en oro no es solo una respuesta al contexto actual. También representa un tipo de estrategia a largo plazo para mantener la estabilidad de un portafolio frente a crisis futuras, inflación o movimientos bruscos del mercado.











