Para abrir una caja de ahorro es suficiente con presentar el Documento Nacional de Identidad (DNI). De esta manera es posible acreditar nombre y apellido, domicilio, lugar y fecha de nacimiento. El banco podría, sin embargo, solicitar requisitos adicionales.
La Caja de Ahorro brinda acceso a medios de pago diferentes a las monedas y billetes. Esto da lugar a un mayor aprovechamiento del tiempo y a una reducción en los riesgos relativos a la seguridad implicados en el manejo de grandes cantidades de efectivo.
Las Cajas de Ahorro en pesos son gratuitas tanto en su apertura y mantenimiento como en la provisión de una tarjeta de débito. A su vez no tiene costo la utilización de cajeros automáticos y terminales de autoservicio de las sucursales del mismo banco y el uso de home banking.
Los menores de 18 años pueden abrir una caja de ahorro y acceso a una tarjeta de débito a su nombre de forma gratuita. No obstante, el titular de la caja de ahorro será el padre, la madre o representante legal del menor que podrá: extraer dinero en efectivo de cajero; comprar en comercios y transferir y pagar por medios electrónicos.
No es necesario tener otro servicio al momento de darse la apertura de una caja de ahorros en pesos. No puede estar condicionada con la adquisición de ningún otro producto o servicio financiero, ni integrar ningún paquete multiproducto.
Sí, es posible. El banco puede exigir una antigüedad mínima como cliente y puede haber costos implicados dependiendo de la entidad.
El banco puede proceder al cierre de la caja de ahorro en caso de no haber registrado movimientos o saldo por 730 días corridos. Antes de proceder a su cierre, deberá avisarte en un plazo no inferior a 30 días corridos para que optes por mantener o no tu caja de ahorro.
La Clave Bancaria Uniforme (CBU) es un código bancario compuesto por 22 dígitos que sirve para identificar una cuenta dentro del sistema bancario argentino.
El CBU sirve para enviar o recibir transferencias de dinero, sean estas de procedencia nacional o internacional. A su vez, es posible mediante el CBU la adhesión al pago de impuestos y servicios por débito automático.
El Alias CBU funciona como un seudónimo. Todas las cuentas bancarias tienen un alias asignado por defecto. Este debe tener entre 6 y 20 caracteres de longitud formado por una combinación que puede incluir letras, números y caracteres especiales. Es, en otros términos, un nombre propio asociado a la cuenta. A diferencia del CBU, es factible de ser modificado.
Existen tres métodos para conocer el CBU: a través de un cajero automático, home banking o en la app de banca móvil. En caso de encontrar dificultades, se puede acudir a la sucursal del banco para pedir asesoramiento en recepción.
La Clave Bancaria Único (CBU) está compuesta por 22 números, que se encuentran separados en dos bloques. En el primero, hay 3 dígitos que corresponden a un número de entidad, otros 3 que corresponden al número de sucursal y un dígito verificador. El segundo bloque está compuesto por 13 dígitos que identifican la cuenta dentro de la entidad y la sucursal, más un dígito verificador.
Al cambiar de tarjeta, tanto el número de cuenta como de CBU permanecen iguales. El CBU se puede modificar desde el sitio web de AFIP siguiendo una serie de pasos.
La Clave Virtual Uniforme (CVU) es un código de 22 dígitos que hace posible realizar transferencias de dinero entre cuentas virtuales, sean bancarias o no bancarias, de manera inmediata y sin costo. La CVU permite realizar acciones financieras a los usuarios de los Proveedores de Servicios de Pagos (PSP).
La diferencia fundamental entre estos dos términos es que el segundo corresponde a una cuenta bancaria (otorgado por un banco tradicional o digital), mientras que el primero responde a una cuenta virtual no bancaria (billeteras virtuales o tarjetas prepagas).
La CVU permite a los usuarios, estén o no bancarizados, recibir y enviar dinero entre las diferentes alternativas de pago del sistema financiero. En este sentido, es posible realizar una transferencia desde una billetera virtual hacia una caja de ahorro en un banco y viceversa. La CVU funciona como equivalente de la Clave Bancaria uniforme (CBU) del mundo bancarizado.
El CVU tiene que estar asociado con un alias único compatible con el alias CBU; un identificador del cliente provisto por el proveedor de servicios de pago y el CBU de una cuenta a la vista con el nombre del proveedor de servicios de pago.
El objetivo de la creación de las CVU es ofrecer interoperabilidad entre los clientes de los Proveedores de Servicios de Pagos (PSP) y otros clientes del sistema financiero. Al igual que el CBU los usuarios cuentan con un Alias y los bancos tienen 120 días para tener operativas esas transferencias.
La CVU fue creada en mayo del 2018 por disposición del Banco Central de la República Argentina.