La industria concentra la mayor cantidad de suspensiones, concentradas en sectores más sensibles a las importaciones, como metalurgia y textil, aunque en el total del empleo se mantienen estables.

Esta semana se conoció la suspensión de 600 trabajadores en la planta de Acindar en Villa Constitución, Santa Fe, hasta el 4 de agosto. Desde el sindicato sostienen que se acordó para evitar despidos, luego de que la producción de acero se redujera a la mitad, mientras que desde la empresa se limitaron a decir que eran 200 suspensiones.