Con más de 350 años de historia, el laboratorio alemán Merck es la empresa de ciencia y tecnología más antigua en el mundo. Aunque está presente hace casi un siglo en la Argentina atraviesa la vida de los argentinos varias veces al día y no solo con sus medicamentos.

Marcelo Ponte, director general del Grupo Merck Argentina, explicó que la compañía "llega a la salud a través de varias ramas. Una de ellas es la farmacéutica, la más fuerte en la Argentina, que desarrolla drogas para vender en diferentes mercados".

Pero, a nivel mundial, Merck también tiene una segunda rama llamada ciencias de la vida que, a su vez, es proveedora de la industria farmacéutica. Entonces, provee equipos o procesos para sintetizar productos, tanto a la industria farmacéutica local, como internacional.

La tercera forma de llegar a la salud de Merck es la investigación básica, que, en la empresa, se la denomina la Academia, mediante la que provee reactivos a organizaciones como el Conicet o el Instituto Leloir.

Entonces, "desde que una persona se levanta, hasta que pasan 20 minutos, Merck le tocó la vida entre dos y tres veces. El control de calidad del agua corriente que llega a la canilla de todos los argentinos lo hace la empresa; en el caso de las pantallas de los celulares están compuestas en un 50% por cristal líquido que, también, es de Merck", repasó el empresario.