

El negocio de las firmas de auditoría atravesó profundos cambios. Con la diversificación de sus servicios profesionales y más regulaciones. Ernesto San Gil lo sabe bien. El actual CEO de la filial local de la EY (ex Ernst & Young) lleva más de 30 años en la empresa, donde los contadores ya dejaron de ser mayoría.
¿El resultado de las elecciones provocó algún cambio en los planes de las empresas?
En todos los años electorales, no sólo en este, hay un poco más de incertidumbre y algunas decisiones pueden postergarse. Pero con las PASO se adelanta el horizonte y reduce luego la incertidumbre. Lo encuentro normal como cada vez que hubo elecciones. No hay muchas decisiones de inversión en consultoría que se posterguen. Auditoría y asesoramiento impositivo necesitás siempre. Puede haberse diferido un poco la transacción de una compra-venta pero pero no tuvo un impacto significativo al menos en nuestro negocio.
¿Cómo están manejando las empresas las dificultades para importar y el cepo cambiario?
Hay bastante actividad de consultas en todas estas cuestiones. Las empresas adaptan sus procesos en la medida que pueden. En algunos casos es más sencillo y en otros es más complejo. Pero, bueno, es lo que hay.
¿Cuál es hoy la mayor preocupación que le transmiten sus clientes?
Son múltiples. El ambiente y el clima de inversiones es una. Pero también están preocupados por la atracción y retención de talentos y por cómo mantienen y ayudan a sus propios clientes. Y por la forma en que estructuran su cadena de abastecimiento. Efectivamente, los temas vinculados a la economía son preocupaciones, pero no son las únicas.
¿Hay expectativas de más inversiones?
En los últimos meses, aún sabiendo que puede venir algún año todavía difícil, veo el humor mejorando. Veníamos diciendo que los activos argentinos estaban rezagados en su valor respecto a otros de la región. Una forma de medir cuán atrasados estaban es ver el valor de las acciones de compañías argentinas en la bolsa que han tenido una evolución en los últimos meses muy positiva. Algunas personas están empezando a tomar posiciones en activos argentinos porque piensan que pueden mejorar, sino no hubiera sucedido este incremento de los últimos meses.
¿Cómo evolucionan los negocios de su compañía?
No nos podemos quejar. Tenemos importante demanda de servicios de consultoría y asesoramiento impositivo. La otra inversión importante que hicimos en los últimos dos años fue un centro talent hub, que presta servicios a nuestros clientes de otras firmas en el exterior. Estamos exportando servicios profesionales a otras unidades dentro de la red de EY. Como la calidad del servicio y de los profesionales es tan buena, este hub está creciendo mucho.
¿Cuántos profesionales trabajan?
En toda nuestra organización vamos a llegar a los 2000 empleados a fin de año. El centro ya tiene 400.
¿La mayoría son contadores?
Nuestra firma ha dejado de ser una firma exclusivamente de contadores. Tenemos ingenieros, abogados, licenciados en economía, licenciados en administración y en tecnología. También hay ingenieros y licenciados en sistemas por todos lados. Además estamos con una unidad nueva de knowledge que se encarga de ayudar a generar investigaciones de mercado y papers.
¿Sigue siendo competitivo exportar servicios?
En servicios profesionales de valor agregado, sí. En este segmento somos muy competitivos si uno compara con otros lugares que podrían hacer lo mismo. En la India, típico ejemplo, es desde luego mucho más barato pero las capacidades y la calidad resultante del trabajo no es equivalente.
¿A qué países exportan más?
Latinoamérica y los Estados Unidos.
Durante la crisis global de 2008, las auditoras fueron muy cuestionadas, ¿cambió algo a partir de entonces?
La crisis no tuvo nada que ver con la contabilidad ni con la auditoría, sino más con modelos de negocios que se usaban en el exterior que alguien pensó que eran para siempre. La contabilidad de los balances no tenían problemas. Independientemente de que también nosotros podamos hacer otras cosas, los cambios debieron ser y están siendo regulatorios respecto de quienes desarrollan las actividades financieras. De todas maneras, el proceso de regulación de la profesión en el exterior avanza y esta profesión, que hace 15 años era autorregulada, ahora tiene más regulaciones. Todos los que firmamos estados contables que son presentados ante la SEC recibimos al menos cada tres años una visita de un organismo norteamericano, PCAOB. Las tres inspecciones que tuvimos, salieron sin ninguna observación. Estamos muy tranquilos y contentos con eso.













