"Hoy nuestras bolsas hechas en Fuerte Apache se lucen en cualquier parte del mundo", dice Luz Muro, una de las creadoras de esta iniciativa que tiene como objetivo no solo crear un producto del que tanto ella como su socia Paula Galay son fanáticas, sino también promover la inclusión social y mejorar la situación económica de personas de bajos recursos.

Amigas y socias, Luz y Paula, de 50 y 60, se conocen desde hace más de 20 años cuando entrenaban juntas para correr 42 km, desde ese momento pensaron en un proyecto en común. Estudiaron Cábala y uno de los gurú del momento les sugirió que el proyecto que hiciesen tenía mejorar la vida de otras personas. "El proyecto debía cambiarle la vida a otras personas y no solo a nosotras", dice Luz Muro.

Con sus hijos más grandes, dejaron sus trabajos y se dedicaron de lleno a darle vida a SeisMasTres. "Nosotras somos bolseras, nuestro mundo cotidiano está adentro de una bolsa, no usamos carteras. Cada vez que viajábamos comprábamos bolsas en mercados, en museos y esa era la idea de lo que queríamos hacer", explica Luz. Pero además pensaron que cada bolsa tenía que llevar estampada la frase que cada persona quisiese. "Hicimos cinco muestras de bolsas y fuimos a una modista y una vez que estuvieron listas buscamos con qué organización u ONG podíamos trabajar para cambiarle la vida a alguien", sostiene.

Pero, encontrar el grupo de gente con quien trabajar no fue fácil, en ese momento el trabajo de Luz le permitía relacionarse con gente importante pero recuerda que "a cada persona que le golpeé la puerta para que me dijera dónde podía encontrar este grupo de personas que quisiese trabajar no me sabía decir nada. De cada reunión salía más confundida", recuerda. Y continua: "En esta búsqueda dimos con Diego Valenzuela, actual intendente de 3 de Febrero, que entrenaba con nosotros, al poco tiempo nos avisó que había un grupo de mujeres que se estaba juntando en la biblioteca de Fuerte Apache, que funcionaba como un espacio de contención social y nos pasó un contacto", explica la emprendedora.

Allí dieron con estas mujeres que se juntaban mientras los chicos estaban en el colegio para aprender a coser. "Algunas sabían hacerlo con mucha habilidad y otras estaban en el proceso de aprendizaje. Pero no tenían un producto o una idea en la que centrarse y poder generar un trabajo estable. Entonces llegamos nosotras con las bolsas, con los rollos de tela, desplegamos todo y les propusimos el desafío de coser arpillera, que no es fácil porque por su trama se descose fácilmente. Sin embargo, la superaron rapidísimo", cuenta.

En un principio pensaron hacer las bolsas con materiales como lienzo, cáñamo o algodones orgánicos hasta que dieron con la arpillera. "Elegimos la arpillera porque donde hay arpillera el planeta respira y nos parecía bueno comprometer al planeta, ser sustento del planeta además de ser sustento para la vida de alguien", dice.

Así empezó SeisMasTres, cuyo nombre viene de que la suma de esos números da como resultado nueve y, esta cifra, en la Cábala representa el número de dar.

Sus mentoras acordaron con las trabajadoras en darles visibilidad, es decir, que las personas que compraran las bolsas supiesen además quiénes las habían hecho.

Por otra parte, lo que hace a estas bolsas tan especiales, además de su compromiso social y ambiental, es que quien las compra estampa una frase, una palabra que la identifica. Desde su barrio, su lugar de nacimiento, el nombre de sus mascotas, sus iniciales; entre tantas, algunas de las más divertidas: "No limpio más", "Mate luego existo", "Siempre terraza", "Agradezcan que vengo".

"La bolsa Hecho en Fuerte Apache, la lleva colgada una persona que vive en París", ejemplifica Luz. Ambas consideran que el espíritu del proyecto es la identidad, es decir que quien compra una bolsa sienta que está hecha para ella y que hay una persona que la hizo y que no proviene de un taller sin nombre.

Además, se les puede sumar un dije que confeccionan un grupo de mujeres de Tigre, con una pasta de reciclado de botones que les dona la industria textil.

"Tanto el grupo de mujeres de Fuerte Apache como el de Tigre y todas las personas que trabajan en SeisMasTres forman un grupo de trabajo dentro de una economía consciente", asegura Luz.

"Ninguno de los trabajos que tuve se compara con la felicidad que nos da este proyecto. Es el trabajo de nuestras vidas, podemos enseñarle a otras personas que el trabajo se disfruta y que del trabajo se aprende y no solo se gana dinero. Estas mujeres y hombres que hoy trabajan con nosotros aprendieron a valorar y hacer valer sus oficios", concluyen.

Ambas tienen como desafío replicar esta iniciativa en el resto del país, el objetivo siempre es lograr que quienes trabajen en SeisMasTres salgan del lugar en el que están para ir a uno mejor.