Esta es la manera de estimular el cerebro de tus hijos lejos del celular
Si tus hijos son adictos al teléfono, debes tener en cuenta estos hábitos que mantienen al cerebro estimulado. De esta manera, podrán potenciar su energía y habilidades.
En la actualidad, los niños y adolescentes sienten una fuerte atracción por la tecnología. Sin embargo, esta los aleja del aprendizaje ingenuo y las habilidades que el mismo entorno les otorga.
Los expertos en salud comparten sencillos hábitos que sirven para estimular el cerebro de tu hijo, evitando siempre que se aburran y haciendo que aprendan valores importantes para su desarrollo.
Al igual que se trabajan los músculos del cuerpo, se recomienda estimular el órgano con estrategias físicas y mentales. Es lo que se demuestra en un estudio realizado por la Universidad de San Francisco, de Quito, que la gimnasia cerebral puede ofrecer un sinfín de beneficios.
Hábitos para estimular el cerebro de tu hijo
A continuación, uno por uno los puntos claves que deberías tener en cuenta en su crianza.
No suspender la lectura
Leer es una fuente de inspiración, una herramienta para hacer crecer tu vocabulario, obtener nuevas ideas, aprender grandes lecciones y mantener el cerebro activo.
Según la Universidad de Emory en Estados Unidos, la lectura trae beneficios mentales y biológicos, independientemente del contenido que se elija.
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Se recomienda asistir a las bibliotecas para que los niños busquen libros y experimenten con distintos géneros y autores.
Enseñar los beneficios de mantener un orden
Los científicos de la Universidad de Princeton aseguraron que el desorden genera cansancio, estrés y malas decisiones. Por ello, cuanto más "ruido visual" haya alrededor, más duro será para el cerebro trabajar y no perder el foco de atención.
Mostrar lo bueno que es no dejar de aprender nunca
Estar en constante aprendizaje es bueno para que el cerebro se mantenga ejercitado, además de poder aprender un nuevo idioma, una afición o un deporte. Se puede convertir en un hábito saludable para que lo mantengan durante toda su vida.
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Además, se previene así el deterioro cognitivo, fortaleciendo la memoria.
Facilitar la respuesta de sus inquietudes
La curiosidad funciona como un motor que nos lleva lejos, por lo que es positivo cuestionarse la realidad, la vida, el entorno.
Hacer y responder preguntas facilita las conexiones personales y ayuda a abrir la mente. Por ejemplo, ver películas en familia y comentarlas después permite expresar emociones y sentimientos.
Procurar que hablen y escuchen a otras personas
Esto obliga a mejorar nuestras las habilidades comunicativas y aprender nuevas cosas, así como también implica el fortalecimiento de vínculos sociales.