La última esperanza de la humanidad: científicos crean un "Arca de Noé" vegetal para salvar la Tierra
El proyecto Science Saving Rainforests busca crear un "banco de semillas vivientes" en Nueva Gales para proteger a especies en peligro de extinción.
En Australia se encuentran los árboles más antiguos del planeta. De hecho, sus raíces se hunden en el suelo que alguna vez formó parte de un supercontinente conocido como Gondwana, que reunía la mayor parte de las masas continentales del hemisferio sur hace millones de años.
Sin embargo, estas especies se enfrenta a una doble amenaza: la invasión humana y el cambio climático.
La deforestación y la fragmentación del hábitat han puesto en peligro su existencia, mientras que las temperaturas ascendentes alteran el delicado equilibrio de su ecosistema.
Ante este panorama desalentador, surge un nuevo proyecto con la esperanza de salvar estos árboles situados en el Big Scrub Rainforest.
La iniciativa propone la creación de un "banco de semillas vivientes", una colección estratégica de plantas cuidadosamente seleccionadas que albergará su diversidad genética.
El "banco de semillas vivientes" que podría salvar a nuestro planeta
Hace 40 millones de años, Australia se separó de Gondwana, convirtiéndose en el último continente moderno en hacerlo y llevándose consigo una gran parte de la biodiversidad que había en ese continente.
De hecho, este linaje todavía persiste en los árboles que se encuentran en las selvas tropicales, desde el norte de Queensland hasta el sur de Nueva Gales del Sur y Tasmania.
La selva tropical de matorrales grandes ha perdido el 99% de su cobertura original, pero aún conserva especies como el carabeen rojo y el carabeen amarillo, cuya existencia se remonta a unos 50 millones de años atrás.
Ahora, el proyecto Science Saving Rainforests, liderado por Big Scrub Rainforest Conservancy, está estableciendo un "banco de semillas vivientes" para proteger estos árboles de los efectos adversos de las condiciones climáticas futuras.
"He pasado los últimos 35 años de mi vida comprometido con la salvación de las selvas tropicales subtropicales de Australia y el Programa Science Saving Rainforests es la iniciativa más importante en la que he participado", explicó el cofundador de Big Scrub Conservancy, Tony Parkes, en un comunicado de prensa.
Un proyecto que busca proteger a los árboles más antiguos el mundo
El equipo de Big Scrub Conservancy ha recolectado muestras de 60 especies vegetales de diversas regiones geográficas para realizar análisis genéticos.
Estos estudios buscan identificar variaciones genéticas que podrían conferir ventajas a las plantas en la adaptación a los cambios climáticos anticipados en Australia en las próximas décadas.
Las muestras seleccionadas serán utilizadas para establecer un "banco de semillas vivas" en una plantación ubicada en Nueva Gales del Sur.
El propósito es cultivar árboles genéticamente adaptados que puedan contribuir a la restauración de los parches remanentes de la selva tropical de Big Scrub, fomentando así su biodiversidad.
Según un informe de Live Science, especies como el Carabeen Rojo y el Carabeen Amarillo son cruciales en este esfuerzo, dado que son fundamentales en la estructura del bosque.
Este proyecto no solo apunta a preservar especies clave, sino también a explorar nuevas formas de intervenir positivamente en los ecosistemas naturales.