

Dos aviones de combate F-18 estadounidenses sobrevolaron este martes el espacio aéreo venezolano sobre aguas del Golfo de Venezuela durante unos 40 minutos, en un nuevo gesto que contribuye a elevar la presión de Washington sobre el Gobierno de Nicolás Maduro.
El sobrevuelo se produjo en torno a las 12:00 hora local (16:00 GMT) en una zona del golfo a unos de 160 kilómetros al noreste de Maracaibo, la segunda ciudad venezolana más poblada.
Las dos aeronaves, identificadas como dos F-18 de la variante F biplaza, realizaron varias idas y vueltas en forma de tirabuzón antes de volar con rumbo norte hasta un punto situado a unos 50 kilómetros al oeste de Aruba, donde se presupone que se encontraba el portaaviones USS Gerald Ford, el mayor y más sofisticado que posee EE.UU.
El Pentágono envió hace unas semanas al navío, que se unió al enorme contingente que Washington mantiene en el sur del Caribe desde final de verano y que supone su mayor despliegue en la región en décadas.
La intrusión en el espacio aéreo venezolano se produjo pese al riesgo que supone la posibilidad de que Caracas emplee sus baterías antiaéreas de fabricación rusa.

El sobrevuelo de los cazas se enmarca en la operación Lanza del Sur, en virtud de la cual el Gobierno de Donald Trump decidió desplegar unos 15.000 efectivos en aguas cercanas a Venezuela, argumentando que se trata de una operación antidroga.
Al tiempo, Washington acusa a Maduro y a una buena parte de su Gobierno y de la cúpula militar venezolana de liderar al Cartel de los Soles, una organización cuya existencia la Administración de Control de Drogas (DEA) estadounidense apenas dio a conocer durante en el mandato de Trump.
Caracas, por su parte, insiste en que el despliegue no es más que una campaña de presión para forzar un cambio de Gobierno en el país caribeño.
“Tiene los días contados”
El presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró que los días de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, están “contados”, y no descartó una posible invasión terrestre al país sudamericano, donde altas figuras del chavismo, por su parte, reiteraron este martes que la nación está dispuesta a “luchar”.
El mandatario republicano, en una entrevista con Politico publicada este martes, fue consultado sobre hasta dónde estaría dispuesto a llegar para sacar a Maduro del poder, que ocupa desde 2013, a lo que respondió: “Sus días están contados”.
Sin embargo, no quiso confirmar ni descartar una intervención terrestre con tropas estadounidenses: “No quiero hablar de eso. ¿Por qué hablaría de eso con Politico, una publicación tan hostil conmigo?”.

Como respuesta, el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, dijo que la determinación de luchar por la libertad del país está reforzada “con armas”.
Asimismo, aseguró que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) ha respondido “dignamente” ante las “amenazas” de EE.UU. y tiene un plan rector que es pertinente con esta “nueva agresión militar y multiforme del imperialismo norteamericano”.
Por su parte, el canciller, Yván Gil, abogó por una “ofensiva revolucionaria” y por la construcción de un movimiento que le pueda dar respuesta al “imperialismo” y a sus aliados.















