

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reveló hoy que existen elementos para pensar que la muerte de un balazo de un dirigente opositor en un acto de campaña fue producto de ‘sicariato‘ por un “ajuste de cuentas” entre bandas.
La muerte de Luis Manuel Díaz, secretario de Acción Democrática (AD), en la localidad de Altagracia de Orituco, del estado Guarico, es investigada por la Fiscalía. Por su parte, Lilian Tintori, esposa del encarcelado dirigente Leopoldo López, condenado a casi 14 años de prisión, denunció hoy que el ataque de ayer fue en su contra. "Me quieren matar", afirmó Tintori en una conferencia en la que responsabilizó a Maduro por la muerte de Díaz.
"Sentí que (las balas) me las habían dado a mí. Lo denuncio (...) es terrorismo de Estado", agrego Tintori en conferencia de prensa acompañada de dirigentes de oposición.
La mujer de López contó que cuando ya estaban terminando el acto de campaña para las elecciones legislativas del 6 de diciembre, ante unas 3.000 personas, escucharon una ráfaga de 10 tiros y Díaz cayó mortalmente herido.
Lo dicho por la oposición "es falso, es una acusación temeraria", respondió Maduro a la televisora estatal. "Cuando (Henry) Ramos Allup (jefe del opositor partido Acción Democrática) dice que bandas armadas hicieron ese acto, los está acusando a ustedes. Está acusando de asesinato a un pueblo noble", agregó durante un acto con seguidores del partido gobernante.
Muerte en medio de la campaña electoral
Acción Democrática es parte de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD). La muerte de Díaz elevó la temperatura de una campaña electoral marcada por denuncias, de parte y parte, sobre actos violentos, y en la que además por primera vez los sondeos señalan que el oficialismo va en desventaja.
Díaz es la primera víctima fatal de la violencia en vísperas de las elecciones del 6 de diciembre. Organismos como la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) y la no gubernamental Amnistía Internacional (AI), en diferente tono, solicitaron investigar los hechos en los que falleció Díaz, quién según Henry Ramos, jefe de su partido, fue hasta hace 5 años un militante chavista.
"El asesinato de Luis Manuel Díaz ofrece una aterradora visión del estado de los derechos humanos en Venezuela", dijo AI en un comunicado.
En tanto, la misión electoral de UNASUR llamó "a las autoridades nacionales competentes para que se realice una exhaustiva investigación de este condenable hecho, con la finalidad de evitar la impunidad frente a este suceso".
Estados Unidos también condenó el asesinato que, de acuerdo al portavoz del Departamento de Estado John Kirby, se trató de un acto de ‘intimidación‘ contra los candidatos de oposición.













