

Una respuesta militar o seguir con el suministro de armas pueden extender el conflicto en Siria al resto de la región, advirtió hoy la responsable de derechos humanos de la ONU.
“Esta terrible situación reclama una acción internacional, pero una respuesta militar o continuar con la provisión de armas puede encender una conflagración regional que resultaría en más muertes y miseria”, declaró la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay.
Al inaugurar en Ginebra la última sesión del año del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la alta comisionada dijo que la única salida está en “una negociación inmediata de pasos concretos para poner fin al conflicto”.
En tanto, Rusia y Siria instaron a Estados Unidos a centrar sus esfuerzos en convocar una conferencia de paz en vez de lanzar una acción militar, dijo hoy el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, después de conversar con su homólogo sirio.
Lavrov dijo que un ataque militar estadounidense en Siria podría llevar a la diseminación del terrorismo, mientras el ministro de Exteriores sirio Walid al-Moualem acusó al presidente estadounidense, Barack Obama, de respaldar a los terroristas, haciendo una comparación con los atentados del 11 de septiembre del 2001 en Estados Unidos.













