Tras más de un año de dilaciones, los restos del dictador español Francisco Franco fueron finalmente exhumados durante esta madrugada y serán trasladados por helicóptero al cementerio de El Pardo - Mingorrubio, en las afueras de Madrid, para volver a ser enterrados en el panteón donde 1988 está enterrada su viuda, Carmen Polo.

Momentos antes de comenzar, 22 miembros de la familia del general, que dirigió España con mano de hierro entre 1939 y 1975 tras su victoria en la Guerra Civil (1936-1939), ingresaron a la basílica para asistir a la exhumación, vestidos de oscuro y banderas de España en las solapas.

Luego de retirar el féretro, el prior de la abadía del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, ofició un breve responso religioso.

Francisco Franco, el dictador que gobernó España por casi cuatro décadas.

El gobierno de Pedro Sánchez hizo de esta exhumación una de sus prioridades tras llegar al poder en junio de 2018, para que este mausoleo dejara de ser un lugar de exaltación del franquismo.

Sánchez había prometido la exhumación para 2018. Pero se retrasó más de un año por la batalla judicial lanzada por los siete nietos del dictador.

La oposición, tanto de derecha como de izquierda, acusa al líder del PSOE de utilizar este traslado para conseguir réditos electorales a poco más de dos semanas de los comicios del 10 de noviembre.

El cementerio adonde serán trasladados los restos.

La decisión del Gobierno se ampara en la ley de Memoria Histórica, que aprobó en 2007 el también socialista José Luis Rodriguez Zapatero.

Finalmente, una veintena de nietos y bisnietos del dictador trasladaron hoy en sus hombros el féretro en el trayecto desde la Basílica del Valle de los Caídos hasta el coche fúnebre que trasladó el ataúd al helicóptero que lo llevará al cementerio de El Pardo - Mingorrubio, su nuevo lugar de sepultura.

Pese a las advertencia del Gobierno de que, en cumplimento de la Ley de Memoria Histórica no estaba permitido enaltecer la figura del dictador, los familiares de Franco lo vitorearon frente a la ministra de Justicia española, Dolores Delgado, que actuó como notaria del Reino de España durante el acto.

Los restos serán trasladados por helicóptero al cementerio de El Pardo - Mingorrubio.

Además, en el cementerio de El Pardo-Mingorrubio se congregaron unos 200 simpatizantes de la extrema derecha, a pesar de que el gobierno español prohibió concentraciones en el lugar.