Los futuros de crudo en Estados Unidos cerraron en baja el viernes, terminando la primera semana del año con su mayor pérdida porcentual.

En gran medida, el petróleo retrocedió debido al alza del dólar y a la debilidad de las acciones. De esta manera, cerró con una baja de 0,4%, a u$s 88,03 por barril.
También influyó el impacto del desempleo. El mes pasado la tasa de desocupados estadounidense bajó hasta el 9,4%, después de que se crearan 103.000 empleos, una cifra menor de los 150.000 que esperaban algunos analistas.