
En tiempos de pandemia la ciberseguridad se vuelve más importante que nunca. Mientras las personas pasan más tiempo y con más herramientas nuevas frente a sus PC, los ciberdelincuentes aprovechan para montar más campañas de estafas y robos. Recientemente se conoció el caso de estafas relacionadas a pagos de subsidios por parte del Gobierno pero ciertamente no son las únicas.
BA CSIRT, el centro de ciberseguridad de la Ciudad de Buenos Aires, registró un aumento del 107% en consultas sobre seguridad informática en los dos primeros meses de aislamiento social, preventivo y obligatorio, respecto al mismo período de 2019. Esto incluye las consultas vinculadas a incidentes. Del total de consultas recibidas durante el aislamiento, el 91% corresponden a incidentes de ciberseguridad. Comparado con el mismo período del año pasado, las mismas aumentaron un 108%. El otro 9% sobre el total de consultas recibidas, corresponden a pedidos de información y consultas sobre capacitación y empleo por parte de los vecinos de la Ciudad.
Según los datos oficiales de la Ciudad, el 28% de las consultas que se realizaron fueron sobre ciberataques que utilizan ingeniería social para engañar a los usuarios y robarles datos. "Los reportes que recibimos, en su mayoría, tienen que ver con campañas de phishing que buscan extraer datos personales más que bancarios. Aunque hay de los dos", explicaron desde la entidad.
"Las consultas recibidas por hostigamiento y/o persecución ofensiva que se da a través de redes sociales, mensajes o llamadas con amenazas y/o insultos, se multiplicaron por 7 en relación al año pasado. Entre ellas, se encuentran las vinculadas a acoso virtual, grooming, ciberbullying y las formas de acoso derivadas del sexting", explicaron desde el organismo encargado de la seguridad informática en la Ciudad.
De hecho, según datos oficiales, los reportes de casos de delitos de índole sexual han aumentado muchísimo y el hostigamiento se manifiesta en todas sus formas: disfusión de imágenes, videos y datos sin consentimiento, agresión, amenazas, creación de perfiles falsos en sitios de pornografía y redes sociales. "Incluso, en muchos de los casos resultan afectadas también personas del entorno cercano a la damnificada directa", dice desde el Gobierno de la Ciudad. Otro de los casos que se vió en aumento es el de las estafas inmobiliarias.

También se efectuaron consultas sobre daño informático que representan el 9,5% del total de consultas de este año y sobre vulnerabilidades reportadas (5,03%) en diferentes sistemas informáticos. Estas debilidades o fallos son los que permiten a un atacante violar la confidencialidad, integridad, disponibilidad, control de acceso y consistencia del sistema o de sus datos y aplicaciones, por lo tanto, pueden poner en riesgo la seguridad de la información de los usuarios.











