En el mes de los enamorados, son varios los solteros que se vuelcan a las aplicaciones de citas en busca de una compañía para pasar San Valentín. En paralelo, los ciberdelincuentes también sacan provecho de esta fecha romántica y las redes sociales, pero con un incentivo completamente diferente.
Los estafadores crean perfiles falsos y se lanzan a la búsqueda de aquellas personas que pretenden establecer un vínculo afectivo. A través de diferentes técnicas, se ganan su confianza para luego llegar a sus cuentas bancarias. A continuación, todos los detalles.
San Valentín: cómo son las estafas en Tinder, Bumble y OkCupid
El modus operandi de los estafadores en las aplicaciones de citas como Tinder, Bumble y OkCupid suele originarse en la creación de un perfil falso que eventualmente atraerá a las víctimas con fotos atractivas e historias conmovedoras.
A través de la cuenta fraudulenta, los actores maliciosos se contactan con diversos usuarios de las redes sociales e interactúan con ellos de forma constante por un largo período de tiempo; estamos hablando de semanas, meses o incluso años.
La clave se basa en generar una "falsa" intimidad y ganarse la confianza de las víctimas. Para ello, los ciberdelincuentes adoptan un leguaje cada vez más cariñoso, halagan a los potenciales afectados y hasta les "confiesan" supuestos secretos.
Una vez que lograron establecer una relación con la víctima, ahí es cuando lanzan el verdadero ataque. Los actores maliciosos, entonces, simulan un tipo de emergencia y le solicitan al usuario una cantidad determinada de dinero que luego reembolsarán, según sus palabras.
El resultado siempre es el mismo: el dinero nunca vuelve y los estafadores se esfuman por completo de las aplicaciones de citas; sin dejar ningún rastro. Para evitar este tipo de fraudes, se recomienda:
- No compartir información personal sensible.
- No enviar dinero a personas desconocidas.
- Tener cuidado con los enlaces que te envían.
- Desconfiar de los perfiles que parecen demasiado buenos para ser verdad.
