

La Real Academia Española (RAE) sorprendió recientemente a los hablantes hispanos al aceptar oficialmente la palabra jijear, un término muy popular en Argentina y que se utiliza hace muchos años en los entornos digitales.
Tras un largo debate sobre su legitimidad y su origen, el diccionario reconoció que este verbo refleja un fenómeno cultural específico del país sudamericano.
Qué significa jijear
La palabra jijear surge principalmente en la cultura digital argentina, especialmente en foros, memes y chats como WhatsApp y X (ex Twitter). La palabra es usada describir la acción de reírse de manera contagiosa, similar a un “jajaja” prolongado. Aunque el término parecía una invención juvenil, su uso constante a lo largo de los años le otorgó legitimidad suficiente para ser considerado por el organismo.

Según lingüistas especializados en el español rioplatense, jijear combina elementos fonéticos del idioma con un matiz cultural muy específico: la risa como forma de comunicación emocional, que refleja la espontaneidad y la sociabilidad característica de los argentinos.
Esta particularidad hizo que el debate sobre su aceptación fuera más profundo, pues se trataba de decidir si la RAE incorporaba un modismo regional al diccionario universal.
De esta manera, la inclusión de “jijear” en el diccionario oficial confirma que las palabras nacidas en contextos digitales y populares pueden trascender su origen y consolidarse como parte del idioma formal.
Cómo se usa “jijear” en la vida cotidiana
En la práctica, jijear se usa para describir una risa ligera, inesperada o contagiosa. Por ejemplo, alguien puede decir: “No pude evitar jijearme cuando vi el video del gato bailando”, reflejando una reacción genuina y humorística. Su versatilidad lo hace común tanto en conversaciones informales como en mensajes digitales.
Además, se ha popularizado en redes sociales, memes y contenido audiovisual, donde la espontaneidad de la risa se convierte en un recurso comunicativo. Muchos usuarios argentinos lo emplean como verbo para describir reacciones divertidas que no necesariamente se traducen con un simple “reírse”.













