El oro es uno de los metales preciosos más valorados en el mundo, con siglos de historia como símbolo de riqueza y poder. Su hallazgo suele estar asociado a excavaciones arqueológicas, pero esta vez, el escenario fue mucho más cotidiano.

En Francia, un hombre que cavaba en el jardín de su casa para construir una pileta desenterró cinco lingotes de oro y varias monedas. El valor estimado del hallazgo ronda los 700 mil euros, y fue confirmado oficialmente por la alcaldía de Neuville-sur-Saône, al norte de Lyon.

¿Qué se encontró en el jardín?

El descubrimiento incluye cinco lingotes de oro y varias monedas, cuyo número exacto aún no fue revelado. Según las autoridades, los lingotes fueron fundidos entre hace 15 y 20 años por una empresa de la región de Lyon, lo que descarta que se trate de un tesoro antiguo o arqueológico.

El oro estaba enterrado a pocos metros de la superficie, envuelto en bolsas plásticas. Sin embargo, no hay documentos ni testigos que expliquen por qué fue enterrado allí ni quién lo hizo.

¿Cuál será el destino del oro hallado?

Tras el hallazgo, el propietario del terreno notificó a las autoridades, incluyendo a la Dirección Regional de Asuntos Culturales (DRAC). Luego de una evaluación técnica, se determinó que el oro no tiene valor patrimonial ni arqueológico, por lo que el descubridor podrá conservar legalmente el tesoro.

Este tipo de resolución es poco común en Francia, donde el Estado puede intervenir si se trata de bienes históricos o minerales. En este caso, la edad reciente del oro y su adquisición lícita permitieron una excepción legal favorable.

¿Cómo se tratan estos casos en Francia?

La legislación francesa establece que, si un hallazgo posee valor arqueológico, el Estado puede reclamar su propiedad. Pero cuando no hay valor histórico ni reclamantes legítimos, el objeto pertenece por partes iguales al dueño del terreno y al descubridor.

Hagai Nativ

Este marco legal, reformado parcialmente en 2016, permitió que el hombre conserve el oro sin intervención estatal. Sin embargo, el origen del tesoro sigue siendo un misterio, ya que el anterior propietario del terreno falleció hace años y no dejó registros sobre el enterramiento.