

Los lunares forman parte de nuestra piel, pero también pueden ser señales de alerta de algo más peligroso. ¿Cuándo hay que prestar atención?
En el sentido más estricto, son lesiones benignas presentes en la mayoría de las personas. Su número es variable, pero hay un dato que se debe tener en cuenta: las personas con más presencia de lunares pueden tener mayor probabilidad de desarrollar cáncer de piel.
Sin embargo, no solamente hay que prestar atención a ese factor. Existe un método que nos permite reconocer si las manchas que presentamos revisten algún peligro o no.
Lunares peligrosos: ¿cuándo hay que prestar atención?
"Los lunares son proliferaciones benignas de melanocitos, las células que dan color a la piel. Pero cuando esa proliferación se vuelve maligna, ya hablamos de melanoma, que es un tipo de cáncer de piel. Por eso es importante prestar atención a la evolución de los lunares en el tiempo", explica la doctora Clara de Diego, médica del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario Austral.
Afortunadamente, existe una manera muy simple para saber cuándo un lunar debería requerir nuestra atención. Se la conoce como la regla del ABCDE, y resume cinco características que, si se presentan, ameritan una consulta dermatológica:
- A de asimetría: un lunar sano suele ser simétrico. Si tiene una forma irregular, conviene observarlo.
- B de bordes: los lunares benignos suelen tener bordes definidos. Si están difusos, desflecados o irregulares, es motivo de consulta.
- C de color: lo habitual es que el color sea uniforme. Si aparecen distintas tonalidades de marrón, negro, rosado o blanco, hay que ir al médico.
- D de diámetro: aunque hoy se detectan melanomas muy pequeños, un lunar de más de 6 milímetros merece seguimiento.
- E de evolución (o elevación): cualquier cambio en el tiempo -ya sea en forma, tamaño, color o relieve- también debe ser evaluado.
Cómo cuidar la piel, el producto que ayuda a proteger tu cuerpo
Para prevenir los daños en la piel por los rayos del sol, que suele ser una de las principales causas de lesiones cutáneas, es indispensable utilizar protector.
"En la actualidad, los pacientes buscan protectores solares livianos, que se absorban de forma inmediata y puedan incluir de forma simple en su día a día. Productos híbridos, que no solo protejan la piel del sol, sino que también tengan la función de tratamiento", sostiene Marilina Zabalo (MN 111660), médica dermatóloga para La Roche-Posay. En ese sentido, los protectores solares con base de sérum están marcando una nueva generación de productos para el cuidado de la piel.

Anthelios UV Air es un protector solar que fue diseñado con los propios consumidores ante la necesidad de una textura más liviana que combinara múltiples beneficios en un solo producto. Su innovadora tecnología UV Air combina una fórmula con sistema de colchón de aire y base de sérum, dando como resultado una textura imperceptible y ultraligera, que ofrece alta protección UVA y UVB, es anti-polución y deja un acabado limpio, fresco y sin residuos en la piel.
Proteger tu piel es un acto de amor propio y es cada vez más sencillo de lograr, solamente con un buen producto que se sume a un hábito de cuidado diario.













