Innovador y creativo, Cerati dejó un sello imborrable en la música

Incursionó en diferentes géneros y en todos consiguió impregnar su estilo. Obsesivo por el sonido perfecto, supo darles calidad y calidez a todas sus canciones.

Gustavo Adrián Cerati Clark falleció hoy a los 55 años tras permanecer en estado de coma durante los últimos 4 años. Líder de la mítica banda Soda Stereo se presentó por última vez el 15 de mayo de 2010 en Caracas, Venezuela, durante la promoción del disco Fuerza Natural. Al término del recital, el músico sufrió una isquemia cerebral y luego un ACV.

Cerati, zurdo, aprendió desde chico a tocar la guitarra con el instrumento al revés. Las primeras canciones que supo tocar fueron de folklore y, con el paso de los años, comenzó a influenciarse con grupos de pop y rock internacionales.

Obsesivo hasta el hartazgo a la hora de mejorar sus canciones, incursionó musicalmente en diversos estilos y en todos pudo dejar su sello, su estilo.

Se aseguró un lugar en el mundo del rock a base de canciones que ya forman parte del cancionero argentino. Pero no contento con esto, prefirió ir por más, no estancarse demasiado en ningún estilo para crecer. Y lo logró.

Guitarrista, cantor, compositor, productor. Encasillar a Cerati en un solo rubro sería injusto. Sobre toda por su capacidad innata para mejorar incluso una y mil veces sus propias canciones.

Cerati alcanzó la popularidad con Soda Stereo junto a su compañero de publicidad en la Universidad de El Salvador, Zeta Bossio, y Charly Alberti, a quien conoció de casualidad luego que el baterista intentara conquistar a su hermana, en la pileta del Club Atlético River Plate.

Si bien tocaba de forma paralela en un grupo denominado Fricción junto al guitarrista Richard Coleman, la popularidad de Soda Stereo hizo que se dedicara de forma íntegra a este proyecto.

Con la creatividad de Cerati enfocada plenamente en Soda Stereo, el grupo se convirtió en una banda masiva, gracias a la incesante búsqueda que tenía el músico por la perfección y el impacto visual. Soda fue al principio una banda de ska-pop que, ya en su segundo disco, “Nada Personal”, se transformó en un pop contagioso, con la banda The Police como influencia indiscutible.

El tercer disco de estudio, Signos, se convirtió en un éxito absoluto y la banda consiguió superar las fronteras de Argentina y conquistó Latinoamérica.

En ese contexto, Cerati fue el líder musical indiscutido de la banda argentina que consiguió abrirle las puertas al resto. Sin Soda, mejor dicho, sin Cerati, la historia de la música argentina y varios músicos argentinos hubiese sido otra.

Los discos “Doble Vida” y “Languis” fueron los preámbulos perfectos para el masivo Canción Animal, que incluía el hit “De Música Ligera”.

A partir de ahí, con Soda Stereo ya consagrada en Argentina y América, Cerati empezó a dar indicios sobre su necesidad de convertirse en solista, para darle paso a nuevos proyectos.

Pero antes apareció “Dynamo”, un disco raro y experimental muy cuestionado, pero que, con el paso del tiempo, fue muy valorado por los fanáticos de Soda Stereo.

Cerati necesitaba un cambio de aire ya que había pasado mucho tiempo con Bossio y Alberti. De su casamiento con la chilena Cecilia Amenábar, madre de Lisa y Benito, y su mudanza a tierras trasandinas comenzó a surgir el proyecto Color Amarillo, su primer disco solista.

Más allá de los problemas personales de Cerati-Bossio-Alberti, Soda Stereo tenía aún un nuevo disco por dar. “Sueño Stereo” fue ese álbum, el último de estudio como banda, antes de que Cerati iniciara otra experiencia musical denominada Plan V, con los músicos chilenos no profesionales Andrés Bucci, Guillermo Ugarte y Christian Powditch.

En 1997, Cerati inmortalizó la frase “Gracias Totales”, en un estadio River Plate repleto por fanáticos de Soda Stereo que habían acudido para darle la despedida a la banda.

A partir de ahí y durante diez años, el músico intensificó su carrera solista: “Bocanada”, “Once Episodios Sinfónicos” –grabado en el Teatro Colón- y “Siempre es Hoy” fueron los discos que sirvieron para mostrar la incursión musical de Cerati por diferentes estilos y con efectos experimentales que dotaban a cada canción de una textura muy particular.

Pero fue recién en 2006, con “Ahí Vamos” y la reaparición de guitarras eléctricas más rockeras que Cerati, como solista, volvió a conseguir la aceptación del público masivo. Otra vez aparecía Coleman como ladero y el disco fue un éxito.

Con su música sonando por diferentes radios gracias a la difusión de “Ahí Vamos”, volvió a circular el rumor de un posible regreso de Soda Stereo, algo que finalmente sucedió en 2007 con una gira denominada “Me Verás Volver”, que llevó a la mítica banda otra vez por todo el continente americano y varios puntos en los Estados Unidos.

Tras el éxito de la gira, todo volvió a la normalidad y Cerati volvió a centrarse en su carrera solista. “Fuerza Natural” fue el nombre elegido para la nueva producción, que mostró un nuevo crecimiento del músico en su incesante búsqueda del sonido perfecto.

El éxito del disco llevó nuevamente a Cerati a emprenderse en una gira por toda América. Fue en Caracas, cerca del Caribe, donde el músico mostró por última vez la calidad de su voz y buena parte de la calidad de su obra.  

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