

Tal como sucedió el pasado viernes, sabuesos de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) realizaban operativos en bancos y casas de cambio de la city porteña para controlar la compra y venta de dólares.
Desde el organismo hablan de “controles de rutina”, que comenzaron a transformarse en algo cada vez más usual para los operadores, que se quejan por no poder desempeñar sus tareas con normalidad.
Operadores dijeron que las supervisiones cambiarias casi paralizaban la plaza: "el mercado de cambios está muy tranquilo y con poco volumen, totalmente descontado el triunfo de Cristina (Fernández)".
"Los controles de la AFIP y la oferta (de dólares) del Banco Central no dejan márgenes de mayores variantes sobre la cotización", dijo un cambista bancario. Otro operador comentó que "en el mercado paralelo (informal) los negocios son muy limitados (por los controles), por eso el dólar cae. Nadie quiere arriesgarse".













