

Las proyecciones del dólar y la inflación en Argentina están siendo motivo de preocupación en un escenario macroeconómico difícil. La consultora Latinfocus ha revelado las nuevas estimaciones para el tipo de cambio oficial y la inflación hacia finales de este año, que se encuentran marcadamente por encima de los niveles actuales.
Según el informe mensual LatinFocus Consensus Forecast de mayo, Argentina tendrá el peor desempeño de la región en 2023, sumergida en una acelerada inflación, escasez de divisas debido a la sequía y una creciente emisión monetaria.
Las proyecciones revelan que el Producto Interno Bruto (PBI) sufrirá una contracción del 2,4% este año, con perspectivas aún más sombrías si se consideran los pronósticos de algunas consultoras, como C&T Asesores Económicos, que estima una caída del 4,8%, según dio a conocer La Nación.
La sequía ha tenido un impacto significativo en la producción de maíz y soja, lo cual se ha traducido en una disminución de las exportaciones, que se tradujo en un rojo significativo en las arcas del Banco Central (BCRA).
A cuánto llegará la inflación este 2023
Según el estudio, se espera que la inflación sea notablemente más alta este año en comparación con el 2022. El informe revela que según los panelistas de FocusEconomics se prevé un aumento promedio de los precios al consumidor del 108,4% en 2023 y del 112,7% en 2024.
La depreciación del peso y el financiamiento monetario del déficit fiscal son factores clave en este incremento inflacionario. Por su parte, C&T Asesores proyecta una inflación anual del 140% para 2023, advirtiendo que esta variable es especialmente propensa a la inestabilidad.

En ese sentido, según las estimaciones los argentinos deberán prepararse para un posible incremento en los costos de vida, una disminución en el poder adquisitivo y un clima económico generalmente incierto.
¿A cuánto terminará el dólar en 2023?
En cuanto al tipo de cambio, el informe señala que el peso argentino seguirá perdiendo terreno frente al dólar debido al prolongado financiamiento monetario del déficit fiscal, así como por la progresiva dolarización de las carteras por la incertidumbre del año electoral.
Se estima que el tipo de cambio oficial mayorista cerrará el año en $391, es decir, un 62% más que en la actualidad, y alcanzará los $791 en 2024.
Si bien algunas previsiones apuntan a una aceleración del crawling peg (ajuste gradual del tipo de cambio oficial), persiste la posibilidad de una devaluación más abrupta antes de fin de año. Según se sugiere, un cambio de gobierno podría implicar modificaciones en el esquema cambiario, lo cual tendría un impacto en el precio del dólar oficial a finales de año y en los meses siguientes.
En diciembre, enero y febrero, podríamos ver una reducción de la brecha cambiaria, lo que a su vez tendría un impacto en la cotización del dólar, así como de los precios de la economía.













