

En un año en el cual el Gobierno busca reducir fuertemente el déficit fiscal y cubrir las necesidades financieras para los próximos años gracias al acuerdo con el FMI, las provincias se adaptan a la nueva coyuntura. La mayoría, tomó deuda en los últimos años, aprovechando el regreso a los mercados internacionales aunque, en contextos de volatilidad económica y financiera, resulta clave repasar sus números de manera agregada.
El equipo de research de Banco Mariva destacó en un informe que las necesidades financieras para el año próximo para las provincias son menores que las de años anteriores debido a la reducción del déficit fiscal primario provincial. De todos modos, dichas necesidades serían ligeramente más altas de las que cerrarían en 2018 debido a mayores pagos de amortización de deuda.
Según los números que proponen desde la entidad, el desagregado de las necesidades financieras provinciales incluyen el equivalente a u$s 0,9 mil millones producto del déficit fiscal primario, u$s 2200 millones en pagos de intereses de deuda y u$s 1600 millones en amortización de bonos.
“En particular, el 55% de los pagos de intereses de bonos provinciales serían en moneda dura. De igual manera, el 94% de los pagos de amortización de los bonos también son en dólares. El 58% de las necesidades financieras del próximo año, (u$s 2,7 mil millones) son en moneda extranjera y el 42% restante serían obligaciones en moneda local. La mayor parte de las necesidades financieras de las provincias en 2019 se originarán en la Provincia Buenos Aires. Dicha provincia tendrá que pagar el equivalente a casi u$s 2400 millones en servicios de deuda en 2019, de las cuales u$s 1239 millones corresponden a pagos de amortización de bonos y u$s 1148 millones a pago de intereses sobre títulos de deuda , finalizó el informe.













