

La crítica situación que atraviesa Grecia afectó a los inversores de todo el mundo, que se mostraron cautelosos a realizar transacciones bursátiles en todas las plazas financieras. Los principales índices globales terminaron la rueda de hoy con números rojos.
Wall Street operó en baja durante toda la jornada, las cotizaciones se desplomaron y la bolsa vivió su peor día en lo que va de este año. El Dow Jones se precipitó casi un 2 % (350 puntos), el S&P 500 registró un descenso del 2,09 % y el Nasdaq retrocedió un 2,40%.
En esta misma línea, el índice preferencial de la plaza brasileña, el Bovespa, también registró una caída y cerró el día con una baja del 1,86%.
Las plazas bursátiles de toda Europa registraron el impacto muy fuerte: las bajas rondaron entre el 3 y el 5% respecto del cierre del viernes pasado.
El índice Euro Stoxx 50, un indicador de las principales compañas del viejo continente, se desmoronaron 4,12%. En Londres, el FTSE 100 bajó 1,97%, en Frankfurt, el DAX descendió 3,56%, en París el CAC 40 se derrumbó 3,74% y en Madrid, el IBEX 35 bajó 4,56%.
Las principales calificadoras de riesgo mundiales han colocado la deuda de Grecia en CCC-, un escalón por encima del Default.
La situación en Grecia es desesperante: por el lapso de seis días -plazo que se cumple el próximo lunes- habrá feriado bancario, los griegos podrán sacar como máximo 60 euros diarios, y el primer ministro heleno, Alexis Tsipras, anunció que no el país no tiene los fondos necesarios como para poder cancelar un vencimiento de mañana por un monto de 1.600 millones de euros.
El próximo domingo los griegos votarán un referendum para definir a través de la consulta si el país acepta o no las condiciones de Bruselas, con la posibilidad de que Grecia salga del euro.
El dato curioso de la jornada es que el euro no se depreció significativamente y se cambió hoy en Wall Street a 1,1186 dólares la unidad.
En Grecia, mientras tanto, miles de personas se manifestaron para mantener la posición de resistencia frente a Europa y pidieron el ‘no‘ en el referéndum, lo que fue catalogado desde el otro lado de la mesa de negociación como una actitud suicida.
Mañana será el día en el que se decida todo -porque el país debe cancelar el vencimiento-, aunque según Tsipras, Grecia no será la gran perjudicada. “Vamos a sobrevivir y vamos a elegir nuestro futuro”, dijo el mandatario.
FUENTE: Agencias Internacionales













