
Al momento de comprar un auto, a los norteamericanos ya no les importa tanto el tamaño y el precio del vehículo, sino que pueda sincronizarse fácilmente con su smartphone, advirtió un alto ejecutivo de la industria automotriz.
En la exposición de autos de Nueva York, que está muy focalizada en el segmento de alta gama, Jim Farley, vicepresidente ejecutivo de Ford Motor para su marca de lujo Lincoln, habló sobre los rápidos cambios que se están produciendo en el comportamiento de los consumidores. Para éstos es sumamente importante que sus aparatos móviles sean compatibles con la tecnología que ofrece el auto, explicó. No sería extraño que un comprador no quiera cambiar de marca de auto porque le resulta difícil transferir sus datos.
El principal mensaje de su discurso fue advertir sobre la necesidad de que las automotrices usen tecnologías similares, en vez de colocar sistemas de información que compitan entre sí.











