El ministro de finanzas paquistaní, Ishaq Dar, se mostró en desacuerdo con el accionar del banco central de Pakistán después de una inesperada caída en su moneda, lo que generó una furiosa respuesta por parte del Gobierno.

Dar dijo el miércoles que sintió una "profunda preocupación e indignación" por lo que él llamó una caída "artificial" en la moneda. Mientras que según economistas, fue un movimiento deliberado del banco central para apuntalar la economía del país.

Además, señaló que se está "explotando la situación política actual", en referencia a una investigación en curso sobre la presunta corrupción del primer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, tras hechos filtrados por la investigación Panama Papers.

La rupia paquistaní cayó a última hora del miércoles de 105 por dólar a 108, alcanzando así un nivel no visto desde 2013. Fue el primer movimiento significativo de la moneda desde 2015.

A pesar de que el ministro de finanzas no precisó quién era responsable de la caída, funcionarios del Banco Estatal de Pakistán (SBP por sus siglas en inglés) indicaron que el banco central había retirado su apoyo a la moneda en un esfuerzo por aumentar las reservas del país.

"No hay artificialidad. El ministerio de finanzas simplemente no está dispuesto a entender la realidad , afirmaron.

El banco central estuvo cerca de asumir la responsabilidad abiertamente. A través de un comunicado afirmó que el SBP considera que “esta depreciación del tipo de cambio abordará el desequilibrio emergente en la cuenta externa y fortalecerá las perspectivas de crecimiento del país .

Las reservas de divisas de Pakistán han caído durante varios meses a medida que las importaciones aumentaban, mientras que las exportaciones y las remesas de los paquistaníes en el extranjero han disminuido.

La suba en importaciones y la baja en exportaciones han sido estimuladas, dicen los analistas, por el hecho de que el banco central ha mantenido la moneda artificialmente alta, cotizando a cerca de 105 rupias paquistaníes desde finales de 2015.

En marzo, el banco central impuso controles de importación a una serie de bienes, ya que buscaba evitar repetir la crisis de cuenta corriente que llevó al país a ser rescatado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en 2013.

Mientras tanto, el país también recibió más de u$s 1000 millones en préstamos de emergencia por parte de China, lo que profundizó el control económico de Beijing sobre su accionar.

En este sentido, se espera que el déficit de cuenta corriente de Pakistán aumente cuando el Gobierno tenga que empezar a pagar a las compañías chinas por los proyectos que forman parte del Corredor Económico China-Pakistán, de u$s 55.000 millones.

Algunos analistas predijeron que Pakistán se vería obligado a regresar al FMI en algún momento, mientras que otros sostienen que una crisis se puede evitar permitiendo la devaluación de la moneda.

Sin embargo, la mayoría de los analistas no esperaba que una devaluación ocurriera hasta después de las elecciones generales del próximo año. La moneda se ha negociado cerca de las 105 rupias paquistaníes por dólar desde finales de 2015, lo que evidencia, según los economistas, el apoyo del banco central.

"Parece que el banco central ha permitido que esto suceda", dijo Mushtaq Khan, economista jefe del Banco Alfalah y exasesor económico del banco central. “Nos ha tomado a todos por sorpresa , agregó.

Aún así, los ministros creen que el banco central está aprovechando deliberadamente las dificultades políticas de Sharif para reafirmarse."Hay incertidumbre causada por las investigaciones contra el primer ministro Nawaz Sharif y su familia , afirmó uno de ellos.