
Hillary Clinton, la favorita para la nominación demócrata en la carrera por la presidencia de Estados Unidos, aseguró que su campaña recaudó cerca de u$s 45 millones en sus primeros tres meses como precandidata, cifra superior al récord que marcó Barack Obama y que refleja su dominio financiero en el bando del Partido Demócrata.
Quienes manejan su campaña electoral contaron que la suma recaudada durante el trimestre finalizado en junio superó sus propias expectativas y que el 91% de las donaciones fueron inferiores a u$s 100. Este es un importante indicador de que está dando frutos la estrategia de Clinton de armar una infraestructura apuntada a atraer aportantes individuales, pequeños, porque éstos son vitales para el éxito de cualquier financiación de campaña desde las bases.
Sin embargo, el número total de donaciones quizás sea inferior a la meta de 50.000 fijada para la campaña.
"Mucha gente dudaba de que pudiera armar una organización impulsada por tantos seguidores de las bases", escribió el jefe de campaña Robby Mook, a los simpatizantes de Clinton por medio de un correo electrónico. "El anuncio de hoy demuestra que estaban equivocados".
Clinton, que en abril anunció que competiría por segunda vez por el sillón de la Oficina Oval, implementó una estrategia doble en los últimos tres meses. La misma incluyó la organización de eventos de élite donde los donantes adinerados "armaron paquetes" de contribuciones de hasta el máximo permitido por ley de u$s 2.700 por persona, y al mismo tiempo incansablemente pidió aportes más pequeños a individuos por email o en forma online.
El anterior récord de recaudación por parte de un candidato para las elecciones primarias fue de u$s 41,9 millones en 2011 y le corresponde a Obama, según quienes manejan la campaña.
Los u$s 45 millones que obtuvo la campaña de Clinton probablemente eclipsen las sumas de dinero que recauden sus principales rivales demócratas el senador de Vermont Bernie Sanders y el ex gobernador de Maryland, Martin OMalley y representan la mitad de la meta que se fijó el equipo de Clinton para este año.
Esa cifra también es independiente de los fondos que capte Priorities USA, el principal SuperPac o comité de acción política demócrata. La ex secretaria de Estado recaudó u$s 26 millones durante los primeros tres meses de su fallida candidatura para la presidencia en 2008, cuando perdió las primarias frente a Obama.
Clinton fue la primera en revelar su cálculo de recaudación total antes de la publicación oficial de un informe más completo el 15 de julio, tal como lo exige la ley para las campañas presidenciales. Del bando republicano, los donantes y estragegas políticos prefieren esperar las revelaciones de los candidatos favoritos para la nominación, incluyendo Jeb Bush, ex gobernador de Florida y el senador también de Florida Marco Rubio.
Se calcula que Bush, cuya campaña desplegó lo que se denomina una táctica de "choque y temor" con la esperanza de fortalecer su posición como el candidato a derrotar, podría recaudar un total cercano a u$s 100 millones. Eso incluye sumas recibidas por su comité de campaña y otros grupos que respaldan su candidatura entre los que se encuentran dos SuperPacs y una organización sin fines de lucro.
Además, acudió a su red familiar de recaudación de fondos y pronunció diez discursos pagos a un productor de metales y municiones surcoreano que ha apoyado a su padre. Bush presentó 33 años de declaraciones de impuestos y detalles financieros que demuestran que ganó u$s 29 millones desde que dejó el cargo de gobernador en 2007.














