No es España ni Francia: estas torres medievales están como hace 500 años y todavía se pueden visitar
Un viaje al corazón del Cáucaso para descubrir las enigmáticas torres de épocas pasadas.
Enclavada en las majestuosas montañas del Cáucaso, la región de Svaneti, en Georgia, alberga un tesoro arquitectónico que ha perdurado casi intacto durante siglos: las torres medievales svanas.
Estas estructuras defensivas, construidas entre los siglos IX y XII, ofrecen una ventana única al pasado y permanecen abiertas para aquellos viajeros que buscan experiencias auténticas y alejadas del turismo masivo.
Torres de Svaneti: un legado arquitectónico único
Las torres de Svaneti, conocidas localmente como koshki, son edificaciones de piedra que se elevan entre tres y cinco pisos. Originalmente, cumplían funciones defensivas y residenciales, protegiendo a las familias locales de invasiones y conflictos tribales. Su diseño robusto y su integración armoniosa con el paisaje montañoso las convierten en símbolos emblemáticos de la región.
La aldea de Ushguli, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es un ejemplo destacado de este patrimonio. Situada a más de 2000 metros sobre el nivel del mar, Ushguli es una de las comunidades habitadas más altas de Europa y cuenta con numerosas torres que se alzan orgullosas, desafiando el paso del tiempo.
La vida en torno a las torres de Svaneti
Estas torres no solo servían como fortificaciones; también eran el núcleo de la vida familiar y comunitaria. En sus interiores, las familias svanas realizaban sus actividades cotidianas, almacenaban alimentos y se refugiaban durante los duros inviernos caucásicos.
La disposición vertical de las torres permitía una defensa efectiva, mientras que su construcción en piedra proporcionaba aislamiento térmico y protección contra los elementos.
Hoy en día, muchas de estas torres se han convertido en museos o alojamientos turísticos, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de experimentar de primera mano la rica historia y cultura de Svaneti. Pasear por las estrechas calles de aldeas como Mestia o Chazhashi es como retroceder en el tiempo, con las torres medievales dominando el horizonte y narrando historias de épocas pasadas.
Svaneti, un destino para los aventureros
Svaneti no es solo un destino para los amantes de la historia; también atrae a aventureros y entusiastas de la naturaleza. La región ofrece rutas de senderismo que serpentean entre montañas imponentes, glaciares y valles verdes.
El sendero que conecta Mestia con Ushguli es particularmente popular, brindando vistas panorámicas y la oportunidad de explorar aldeas remotas donde las tradiciones svanas aún están vivas.
Además, durante los meses de invierno, las montañas de Svaneti se transforman en un paraíso para los esquiadores. Estaciones como Tetnuldi y Hatsvali ofrecen pistas para todos los niveles, con el añadido de paisajes inigualables y la autenticidad de una región que ha mantenido sus costumbres intactas.
Preservación y futuro de las torres de Svaneti
A pesar de su resistencia, las torres de Svaneti enfrentan desafíos en términos de conservación. Las inclemencias del tiempo, los terremotos y el paso del tiempo han afectado a algunas estructuras.
Sin embargo, tanto el gobierno georgiano como organizaciones internacionales están trabajando en proyectos de restauración para asegurar que este patrimonio único se mantenga para las futuras generaciones.
Visitar Svaneti es una oportunidad para sumergirse en una cultura ancestral, admirar una arquitectura singular y disfrutar de paisajes que quitan el aliento. Es un recordatorio de que, más allá de las rutas turísticas convencionales, existen rincones del mundo donde el tiempo parece haberse detenido, esperando ser descubiertos por aquellos dispuestos a aventurarse un poco más allá.