El encantador pueblo de montaña en medio de ríos y bosques que debes visitar al menos una vez en la vida
Este valle pirenaico tiene paisajes que ascienden hasta los 3000 metros de altitud y tiene pueblos llenos de encanto.
El Valle de Tena es uno de los más extensos y poblados del Pirineo y se encuentra situado al norte de Aragón, en la provincia de Huesca. Es un sistema montañoso que establece la frontera natural entre Andorra, España y Francia.
Este valle aragonés es famoso por sus pistas de esquí entre las que se destacan Formigal o Panticosa y es perfecto para realizar una escapada en el verano que combine deporte y naturaleza.
Escapadas: qué ver en el Valle de Tena
El Valle de Tena se abre paso en Sabiñánigo, capital de la comarca de Alto Gállego. La entrada, por el estrecho de Santa Elena es uno de los restos de la antigua morrena glaciar y aloja al dolmen, el fortín y la ermita.
Biescas es el primer pueblo importante que encontramos al entrar al valle por el sur y, al final, casi en la frontera con Francia, aguarda el impactante Sallent de Gállego.
Entre Sabiñánigo y Biescas se puede visitar una serie de pequeños pueblos como Lárrede, Orós, Gavín, Satué o San Juan de Busa, cada uno de ellos más bello que el anterior. Y en ellos se puede realizar la "Ruta de las iglesias de Serrablo", compuesta por catorce templos de origen mozárabe,
Planes para hacer en el Valle de Tena
A continuación, te presentamos 3 rutas increíbles para disfrutar el Valle de Tena.
Senderismo: ruta de Punta de las Eras
Este recorrido asiste a uno de los miradores naturales más bellos del Valle de Tena, en el pueblo de Sandiniés.
En el mirador, podrás ver y reconocer todos los picos del entorno, como la Sierra Partacua, la Sierra Tendeñera o los picos de Pimindayuelo, Cochata, y Pacino.
Además, para aquellos aventureros, en lo alto del cerro encontrarás un antiguo bunker perteneciente a la línea defensiva conocida como Línea P, construida tras la Guerra Civil.
Visita a la Lacuniacha
El bioparque Lacuniacha se encuentra en el bosque La Pinosa. En su interior habitan más de 30 especies autóctonas y durante el paseo de unos cuatro kilómetros que supone, podrás ver bisontes, osos, sarrios y hasta lobos.
Tren de Tramacastilla
El tren turístico que te sube hasta Ibón de las Paules es ideal para un día tranquilo, donde se puede aprender de la vida en el valle y los animales que lo habitan.