

Cuando alguien reúne un ahorro, suele enfrentarse a la duda sobre cuál es la mejor forma de moverlo. No se trata solo de una decisión técnica, también influye la manera en que se vive la experiencia de invertir.
Antonio Rivas, especialista en finanzas personales, abordó este tema en redes sociales. En un vídeo de su canal de TikTok explica que, aunque invertir todo de una vez pueda parecer más directo, esa elección puede tener efectos adversos en el ánimo del inversor.
Su consejo se inclina hacia un método gradual, respaldado por técnicas como el Dollar Cost Averaging (DCA).

El mejor método para empezar a invertir
Ante la pregunta de un usuario, que quería saber cómo invertir 3000 euros, Rivas explica que, antes de mover el dinero, conviene formarse con economistas colegiados o independientes. Esta preparación permite entender bien los riesgos y las oportunidades de cada opción.
En su explicación, defiende que utilizar la estrategia DCA ayuda a repartir las compras en el tiempo y suavizar las oscilaciones de los mercados. "Siempre es mejor hacerlo poco a poco", señala.
Qué ventajas tiene invertir de manera gradual
Una de las claves de esta estrategia es que permite obtener una rentabilidad media en lugar de quedar expuesto al peor momento del mercado. "Te llevas la rentabilidad media, que es lo que realmente interesa", afirmó Rivas.
El experto advirtió también que "si inviertes 3000 euros de golpe en un mal momento, puedes tardar mucho tiempo en recuperarte y que se te quiten las ganas de invertir". Para él, la forma en que se vive la primera inversión es tan importante como la rentabilidad que se consiga.

Cómo aplicar esta estrategia de manera práctica
Rivas recomienda decidir primero en qué tipo de activo se quiere invertir, ya sea renta fija, renta variable u opciones más diversificadas. A partir de ahí, sugiere fijar una cantidad regular que se destine al mercado de forma periódica.
De este modo, explica el experto, la inversión se distribuye y se reduce la exposición a los vaivenes de la bolsa.
Dividir una suma como 3000 euros en varias partes permite avanzar con mayor seguridad y mantener la constancia necesaria para que la inversión dé resultados en el tiempo. Es un enfoque que, más allá de los números, apunta a construir hábitos financieros más sólidos.
La intención de Rivas es explicar que invertir ya no se entiende como un salto al vacío, sino como un proceso de aprendizaje en el que la paciencia y la disciplina resultan tan valiosas como el propio capital.














