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Cada vez que lavamos nuestras prendas blancas, éstas pierden parte de su brillo. Ya sea por el uso de productos agresivos, por residuos de cal en el agua o por el paso del tiempo, los tejidos blancos tienden a tornarse grisáceos o amarillentos.
Si bien existe un abanico de trucos caseros para recuperar el blanco original, uno de los más efectivos y poco conocidos es el uso de la aspirina. ¿Cómo puedes utilizarlo?
El ingrediente de limpieza más potente para blanquear la ropa y dejarla como nueva
El secreto descansa en el ácido acetilsalicílico, el componente principal de este medicamento. Gracias a sus propiedades, es capaz de descomponer residuos orgánicos y químicos presentes en los tejidos, lo que permite eliminar manchas, amarillamientos y velos grisáceos sin necesidad de recurrir a productos agresivos.
Este método resulta especialmente eficaz para tratar manchas de sudor o sangre y devolver el blanco original a las prendas.
Una ventaja de utilizar este truco es que, a diferencia de otros métodos más agresivos, como la lejía, la aspirina no debilita las fibras ni altera la textura de la tela, por lo que es el método más adecuado para quienes buscan un resultado visible sin arriesgar la durabilidad de sus prendas.
Paso a paso, ¿cómo aplicar el truco correctamente?
Sigue estas instrucciones para obtener el mejor resultado posible:
- Llena un recipiente grande, como una bañera o una cubeta, con agua caliente (sin que llegue a quemar; si la mancha es de sangre, usa mejor agua fría).
- Disuelve entre 3 y 5 comprimidos de aspirina de 500 mg en el agua. Puedes triturarlos previamente para facilitar su disolución.
- Sumerge la ropa blanca que quieras tratar. Asegúrate de que quede bien empapada.
- Deja actuar entre 6 y 8 horas. Si puedes, hazlo durante la noche.
- Luego, lava las prendas como de costumbre en la lavadora, usando tu detergente habitual.
Se recomienda aplicar este método en prendas como camisetas, toallas, sábanas o ropa interior blanca. Notarás cómo recuperan un tono más limpio y uniforme desde el primer lavado.
¿Cada cuánto se puede aplicar este truco?
Aunque es seguro para la mayoría de las telas blancas, no se recomienda utilizarlo con demasiada frecuencia.
"Una vez al mes o cada seis semanas es más que suficiente para mantener el blanco sin deteriorar la prenda. Como siempre, es recomendable revisar las etiquetas de cuidado antes de aplicar cualquier método casero", informan desde el portal CuerpoMente.
