Descubrimiento sin precedentes: hallan una estatua egipcia que estuvo oculta por miles de años
Un equipo de arqueólogos revela un hallazgo inesperado que arroja nueva luz sobre la historia del antiguo Egipto.
Ramsés II, uno de los faraones más icónicos de la historia egipcia, sigue asombrando al mundo incluso milenios después de su reinado. Conocido por su poder y longevidad en el trono, Ramsés dejó una marca indeleble en la historia de Egipto, consolidando su nombre en los anales del Imperio Nuevo.
El sorprendente descubrimiento de la estatua de Ramses II
En 1930, el arqueólogo alemán Gunter Roeder desenterró la parte inferior de una estatua monumental que representaba a Ramsés II. Casi un siglo después, un equipo de investigadores se reunió para explorar un centro religioso en las antiguas ruinas de Hermópolis, donde hicieron un descubrimiento inesperado: la parte superior de la estatua del gran faraón.
La escultura recién descubierta muestra a Ramsés II en posición erguida, con un tocado adornado con la cobra real, un símbolo de gran importancia en el antiguo Egipto. Esta mitad de la figura, que mide aproximadamente 3,80 metros de largo, revela solo una fracción del tamaño original de la estatua, que se estima en siete metros de altura cuando estaba completa.
El material utilizado para la escultura es piedra caliza, y los expertos han identificado jeroglíficos que exaltan la figura y el reinado de Ramsés II. Además, el descubrimiento de rastros de pigmentos ofrece nuevas oportunidades para investigar la historia y el propósito de esta antigua reliquia, de acuerdo a lo publicado por IFL Science.
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Reconstruyendo la imagen del faraón
En un esfuerzo por dar vida a la figura de Ramsés II, la Universidad Liverpool John Moores ha creado una recreación en 3D basada en tomografías computarizadas de la momia del faraón. Este proceso ha revelado detalles sorprendentes sobre la apariencia física de Ramsés, desde su tez oscura hasta los detalles de su rostro, incluida una nariz prominente y la evidencia de calvicie en su vejez.
Además, la recreación digital ha sugerido que Ramsés II podría haber usado pendientes en algún momento de su vida, una práctica común entre los hombres del Antiguo Egipto. Esta nueva comprensión de la apariencia física del faraón ofrece una visión más completa de su vida y su reinado.
Uniendo el pasado con el presente
Los funcionarios del Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto están considerando la posibilidad de unir las dos mitades de la estatua de Ramsés II para su exhibición en un museo.
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Aunque esta propuesta aún no ha sido aprobada, podría ofrecer una oportunidad única para que el público se conecte con la historia y el legado de uno de los gobernantes más influyentes del antiguo Egipto.