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Los supermercados Lidl se han consolidado como una opción habitual para miles de consumidores que valoran precios competitivos y proximidad. La red de distribución de la marca alemana incluye múltiples establecimientos estratégicamente repartidos por la ciudad y sus alrededores.
Sin embargo, a pesar de su éxito entre los españoles, esta cadena no está exenta de cambios. La tienda Lidl de la calle Bac de Roda, una de las tiendas más frecuentadas del distrito, cerró de forma definitiva el sábado2 de agosto tras años de servicio continuo a cientos de clientes del entorno.
Cuál es el motivo de este cierre
La tienda de Lidl en el número 178 de la calle Bac de Roda, en Sant Martí, echará ha cerrado de forma permanente el sábado 2 de agosto tras completar su jornada habitual hasta las 21:30 horas. En el escaparate se ha colocado un cartel informativo que comunica la decisión y sugiere otros establecimientos cercanos para continuar comprando en la zona.
Detrás de esta medida no hay un comunicado oficial de la compañía, pero tanto vecinos como medios apuntan a que forma parte de una estrategia de reorganización y optimización comercial, llevada a cabo por Lidl en varios puntos de Barcelona donde busca mejorar rendimiento y eficiencia de su red.
Qué podrán hacer los clientes de esta tienda
Los carteles colocados por la cadena invitan a los clientes a acudir al Lidl de la calle del Treball número 238, dentro del mismo distrito de Sant Martí, que operará como principal alternativa para los vecinos afectados.
La disponibilidad horaria de esta tienda cercana (de lunes a sábado hasta las 21:30h y cerrada los domingos) permite minimizar en parte el impacto del cierre. Sin embargo, usuarios consultados han manifestado su preocupación por la pérdida de comodidad que representaba el acceso al servicio en su propio vecindario.
Cierres que no frenan el crecimiento
A pesar del cierre de este punto de venta, Lidl mantiene un plan de expansión activo en Cataluña. En los últimos meses ha inaugurado nuevos supermercados en barrios como Gran de La Sagrera, Sant Iscle o Sant Gervasi, reforzando su presencia en áreas con mayor crecimiento comercial.
Además, ha impulsado su capacidad logística con una gran plataforma en Martorell, considerada la más grande del sur de Europa, con el objetivo de potenciar su eficiencia ante la demanda creciente.
Esta práctica de cerrar establecimientos menos rentables para reorientar recursos hacia zonas más estratégicas ha sido recurrente para Lidl en España, sin que ello signifique un retroceso general en su penetración de mercado.
Qué supone para los vecinos el cierre de esta tienda
Para muchos residentes del barrio, el continente del Lidl en Bac de Roda representaba no solo un punto de compra, sino también un nodo social cotidiano y un recurso rápido para compras de última hora. Su desaparición deja un vacío en términos de servicio de proximidad, que algunos vecinos consideran irreemplazable.
Eso sí, el impacto se mitiga en parte con la cercanía de la alternativa en la calle del Treball, aunque no todos los usuarios estarán dispuestos o podrán adaptar su rutina diaria al nuevo recorrido. El cierre marca, en definitiva, el final de una etapa para muchos compradores habituales del distrito.
