

Con el 32% de los votos, el radical Gerardo Merino ganó ayer las elecciones en Trelew. Se trata del dirigente que ganó las primarias como candidato del PRO y de la UCR no oficialista. El triunfo de Juntos por el Cambio en la segunda localidad de Chubut le deja un mensaje a la principal coalición opositora, pero también al oficialismo: debe mantenerse unida si quiere llegar a buen puerto en las elecciones nacionales.
Ayer no solo hubo elecciones en las provincias de Río Negro y Neuquén. Sino también en la localidad chubutense, en donde se impuso el candidato de Juntos por el Cambio que terminó con dos décadas de peronismo en ese municipio.
Merino logró cosechar casi un tercio de los votos y le ganó al segundo candidato por más del doble. ¿Un dato? El peronismo fue dividido en cinco listas, allanándole así el terreno al radical.
El segundo puesto quedó para Emanuel Coliñir, el peronista que tiempo atrás recibió la visita del jefe de La Cámpora, Máximo Kirchner. El peronista no alcanzó los 16 puntos.
Por ser el candidato del PRO en las PASO, Merino no solo recibió felicitaciones por parte del partido centenario. Sino también, fueron varios los amarillos que celebraron el triunfo patagónico.
Entre ellos, el expresidente Mauricio Macri. Lo propio hicieron Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. También celebró el triunfo el senador Ignacio Torres, el amarillo que apuesta a ser el próximo gobernador de Chubut.
El triunfo cambiemita se convirtió en la primera elección del año en la que la coalición opositora se impone al oficialismo gobernante. El triunfo envalentona a la oposición que aspira a desembarcar en Balcarce 50 el 10 de diciembre.
Si se proyecta el resultado de Trelew a los comicios nacionales, las conclusiones son dos.
La primera, que si Juntos por el Cambio quiere imponerse en las elecciones nacionales, deberá asegurarse de llegar unidos. Dejar atrás las diferencias y encolumnarse detrás de la fórmula que resulte ganadora en las PASO. Hoy, los dos candidatos más competitivos son Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, que vienen haciendo públicas sus diferencias.
La segunda es que si el peronismo va dividido, las chances de ganar, para la oposición, son todavía mayores. Así lo entendió el PJ en 2019, lo que derivó en el Frente de Todos donde, las diferentes vertientes del peronismo confluyeron en la fórmula Fernández - Fernández.













