La estrategia comunicacional de La Libertad Avanza sufrió una seria reestructuración luego de la primera vuelta. Mientras que Javier Milei redujo su exposición pública en caravanas y en los medios de comunicación, el efecto cerrojo se extremó aún más para los demás referentes del espacio, siendo unos pocos los que tienen autorización para declarar en medios de comunicación.
El círculo de confianza que tienen encargada la interacción con el afuera lo configuran los eventuales ministros de Milei, Guillermo Francos (Interior) y Diana Mondino (Relaciones Exteriores); y la candidata a Vicepresidenta Victoria Villarruel. Otros personajes debieron apaciguar sus apariciones mediáticas y en redes a pedido de los estrategas de campaña.
En La Libertad Avanza aprendieron de la experiencia de la última semana antes de las generales. Allí, el mentor intelectual de Milei, Alberto Benegas Lynch (h.) y la diputada electa Lilia Lemoine, personas con exposición pública, pero sin poder decisorio en la mesa chica libertaria, realizaron declaraciones que generaron una fuerte polémica e implicaron un alto costo en términos de la discusión mediática.
Faltando un poco más de dos semanas para el balotaje, desde el equipo mileista buscan que las órdenes hacia el interior de la alianza sean acatadas en su totalidad y se generen la menor cantidad de furcios posibles.
Aun así, la vulnerabilidad del espacio no mermó. Este miércoles, un grupo de legisladores electos hizo circular a los medios una carta en la que repudiaron el acuerdo electoral entre Milei y Mauricio Macri, alegando que "moral e ideológicamente" era su "límite".
El documento fue firmado por dirigentes de poco peso y algunos de ellos, incluso, desmintieron haber dado su aval para apoyar esa postura. Aun así, este episodio generó un ruido mediático significativo, dando la impresión de que La Libertad Avanza tendría una pequeña fractura en su bloque de Diputados, con repercusiones en otras cámaras legislativas; algo que, vale aclarar, no sucederá.
El comunicado titulado "En defensa de las ideas y del proyecto libertario" alegaba que Macri había tomado la mayor deuda de la historia argentina, "hipotecando a las generaciones futuras", y que "una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre". "No podemos acompañar este cambio de rumbo solo con fines electorales", marcaban.
Originalmente, el documento estaba firmado por la senadora electa Ivanna Arrascaeta (San Luis) y los diputados electos Lisandro Almirón (Corrientes), Gerardo González (Formosa) y Pablo Ansaloni (Buenos Aires). También se le sumaban cuatro parlamentarios del Mercosur y tres diputados provinciales de Entre Ríos.
A las pocas horas, varios de sus supuestos firmantes se despegaron del documento y aludieron a que nunca se les había propuesto participar en algo similar.
"Quiero aclarar que estoy totalmente convencido con las ideas de la libertad y alineado de punta a punta con Javier Milei", dijo Almirón en declaraciones radiales. González, por su parte, afirmó ante a El Cronista que "nunca estuvo en conversación firmar un documento con esas expresiones, no me representa en nada eso". Lo mismo dijo Arrascaeta: "Yo no firmé ningún comunicado".
La confusión fue significativa, dado que minutos antes de todos ellos, Ansaloni había comunicado que el documento era verídico. "Siempre voy a estar en contra de Macri", sostuvo en el diálogo con los medios. Esa misma postura fue compartida por el parlamentario del Mercosur Fabricio Cascino, quien ante Radio Rivadavia dijo que estaba con dudas de asumir el cargo: "Me desenamoré, no me gustan estos acuerdos espurios. Lo que quiero es que reaccione mi partido y se dejen de rifar cargos por el hecho de llegar".
El comunicado alteró los estados de ánimos de los principales conductores nacionales de La Libertad Avanza, quienes buscaron comunicarse con los demás firmantes que no habían salido a hablar para que hagan pública su posición.
El parlamentario del Mercosur electo Mario Nallar acusó haber sido víctima de una operación mediática. "Nos mantenemos firmes e incondicionales en nuestro apoyo", dijo en un comunicado. Los demás dirigentes incluidos no ratificaron o negaron su postura.
La operación que acusan en La Libertad Avanza
Un excandidato que mantiene diálogos diarios con el presidenciable libertario le dijo a El Cronista que "esto es todo orquestado por el massismo".
Otra fuente de primera línea alegó: "Igualmente no estamos hablando de gente importante, no son gente conocida y no representa en nada al espacio". Ninguno de los firmantes integra el círculo chico de Milei ni tiene peso en la toma de decisiones del espacio, por lo que no debería alterar el normal funcionamiento de la política interna.
Incluso, muchas de aquellas personas no se reconocen como libertarias, sino que contribuyeron en la colocación de sus sellos partidarios para permitir la presentación electoral de La Libertad Avanza en sus respectivas provincias.
Este es el caso de una de las difusoras de la carta, Liliana Salinas, diputada provincial electa y presidenta del Partido Conservador Popular, el frente partidario con el que le dio sustento legal a Milei para que pudiera presentarse en Entre Ríos.
La pregunta que genera el episodio es la vulnerabilidad interna que sufre el espacio, dado que esto sucedió, incluso, con personas que fueron seleccionadas por el propio armado nacional.
¿Qué pasaría en un eventual gobierno mileista? Hasta el momento, alegan desde La Libertad Avanza, los colaboradores sugeridos por Mauricio Macri para intentar de dar vuelta el panorama electoral se mantienen solamente hasta el balotaje. Sin embargo, ya son públicas las disconformidades de algunos referentes de Milei sobre la exposición de Macri y la influencia que comenzó a ejercer en la campaña libertaria.
La primera pregunta formulada en el párrafo precedente vuelve a repetirse.