

El inicio de clases luego del receso invernal, que terminó el viernes pasado en la provincia de Buenos Aires, se postergará 48 horas, ya que los docentes bonaerenses ratificaron un paro el lunes y el martes en reclamo por el incumplimiento de algunos puntos acordados en la paritaria del sector de este año.
Lo que reclaman los docentes de la provincia es que “se cumpla la cláusula que implica una revisión de la evolución del salario para evitar la pérdida del poder adquisitivo”, de acuerdo a lo que dijo la titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini.
“Nosotros tenemos claro que el poder adquisitivo de nuestro salario no deja de caer por la inflación, el aumento de servicios, nafta, impuestos y alimentos”, sostuvo la dirigente en declaraciones radiales.
La titular del gremio destacó que la huelga se realizará por la “falta de respuesta” del gobierno bonaerense.
Por su parte, el Jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, consideró que el paro “está fuera de contexto”porque el aumento otorgado en marzo, que es mayor al 30%, “no ha sido superado por la inflación marcada por el Indec ni por ninguna de las consultoras privadas”.
Según su opinión, las medidas como los paros, “perjudican a los chicos de escuelas públicas de varias provincias y a las familias que ven modificada su rutina”.
El paro se replicará en algunas escuelas de Capital Federal y varios distritos de la Argentina, mientras que sólo Santa Cruz estará sin huelgas.
La Federación Nacional Docente (FND), enrolada en la CTA de Pablo Micheli, con las seccionales disidentes de Suteba, Ademys y sindicatos docentes de Santa Fe, Misiones, Chaco, Formosa, Salta y Neuquén, realizarán una protesta a nivel nacional y una movilización en Capital Federal.












