El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, destacó este mediodía el trabajo de prevención que están realizando los agentes de seguridad vial durante las vacaciones de verano y pidió la “colaboración” de los padres para evitar accidentes como el que le costó la vida a un nene de 10 años que montaba un cuatriciclo en Pinamar.

“Como padre, pido que nos ayuden, a los padres, es mejor decirles que no a los hijos que ir a buscarlos a la morgue”, expresó el funcionario.

Tomás Ogresta, de 10 años, viajaba ayer por la tarde en la parte trasera del vehículo que manejaba un familiar suyo de 15 años en los médanos de la zona conocida como La Frontera, a la altura del parador “El más allá”. El adolescente perdió el control del vehículo y los dos salieron disparados; el menor de los dos falleció y el joven quedó internado en el Hospital Comunitario de Pinamar.

“Nosotros estamos haciendo un gran esfuerzo con la ANSV (Agencia Nacional de Seguridad Vial) en el principio de la temporada y en la zona donde ocurrió el hecho”, afirmó Radazzo y agregó: “Hemos impedido que 815 pibes anden en cuatriciclo siendo menores de edad. Y cualquiera de ellos pudo haber sido Tomás”.

El ministro justificó que desde el Gobierno no pueden “poner a un agente de la Agencia con cada padre”. “Por más esfuerzo que se haga del Estado, si hay un menor (montando un cuatricilo), hay un padre que autorizó. Es imposible sin la colaboración de los padres”, agreó y concluyó: “Nadie se imagina una situación así, pero hay que imaginarla”.