Rafael Grossi, director del OIEA y candidato a suceder a António Guterres en la Secretaría General de la Organización de las Naciones Unidas, presentó su visión para recuperar la relevancia del organismo, en una exposición organizada por el Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI) ante un auditorio colmado que reunió funcionarios, diplomáticos, académicos y referentes del sector privado.
El presidente del CARI, Francisco de Santibañes, abrió la sesión —que tuvo lugar en el predio de La Rural— y destacó la trayectoria de Grossi, así como el interés que genera su candidatura en distintos ámbitos. Subrayó el papel del Consejo como espacio de análisis y discusión de política internacional, donde confluyen miradas diversas en un entorno plural. También afirmó que encuentros de esta naturaleza forman parte de la misión del CARI de promover debates sustantivos sobre los principales desafíos globales.
El canciller Pablo Quirno señaló luego el respaldo del Gobierno a la postulación de Grossi y destacó que su experiencia en escenarios de alta sensibilidad internacional constituye un activo para la Argentina y para el sistema multilateral. Sostuvo que el país puede asumir un papel más relevante en la gobernanza global y consideró que la candidatura de Grossi ofrece una oportunidad para fortalecer ese objetivo. Valoró además su trayectoria en verificación nuclear y su labor en misiones complejas.
Rafael Grossi expuso los lineamientos centrales de su propuesta para conducir la ONU y señaló la necesidad de que el organismo recupere capacidad de intervención, prevención de conflictos y presencia en zonas críticas. Recordó sus gestiones en Ucrania, incluidas sus interlocuciones con Vladimir Putin y Volodimir Zelensky para garantizar la supervisión internacional de la planta de Zaporiyia, y repasó su trabajo para mantener canales abiertos con Irán pese a presiones y amenazas. “Necesitamos un secretario general que se ponga las botas y vaya donde existe el problema”, afirmó. También pidió encarar una reforma profunda “sin hipocresías” y sostuvo que la ONU debe volver a operar como plataforma de negociación y disuasión. Cerró con una frase que sintetizó el tono del encuentro: “En 2026 vamos a jugar dos mundiales, y yo creo que vamos a ganar los dos”.
El evento reunió a una amplia representación del sector público, entre ellos Sandra Pettovello, ministra de Capital Humano; Daniel Scioli, secretario de Turismo, Ambiente y Deportes; Carlos Torrendell, secretario de Educación; y Agustín Caulo, subsecretario de Culto y Civilización. También asistieron dirigentes como Federico Pinedo junto con empresarios destacados: Eduardo Elsztain (IRSA), Marcos Bulgheroni (Pan American Energy) y Mario Montoto (Codesur). Embajadores y representantes del cuerpo diplomático acreditado en la Argentina completaron la audiencia.
La actividad se insertó en el programa del CARI orientado a promover debates informados sobre política internacional y temas globales prioritarios. Además, retomó el reconocimiento que el Consejo otorgó este año a Grossi con el premio que lleva el nombre de su fundador, el excanciller Carlos Muñiz, distinción que subraya su aporte a la diplomacia argentina y al fortalecimiento del multilateralismo.













