El presidente Javier Milei recibiría este viernes en la Quinta de Olivos nuevamente al exmandatario Mauricio Macri junto al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, luego del reencuentro secreto del fin de semana. El acercamiento se da en medio de las tratativas para reconstruir gobernabilidad.

Esta segunda reunión la agilizó el jefe de Estado, quien determinó esta semana que su gira de campaña por provincias será este sábado en vez del viernes. Desde el PRO aseguraron El Cronista que la idea era que el encuentro sea antes del domingo, puesto que Macri tiene programado también un viaje a Europa.

Si bien el PRO desconfía sobre el alcance del acuerdo que puedan entablar con el Gobierno, las fuentes destacaron, tras el reencuentro de domingo pasado que su cercanía con Guillermo Francos será clave para facilitar el acercamiento. De hecho, según pudo constatar El Cronista, fue el propio jefe de Gabinete quien articuló la primera reunión que rompió el hielo tras un año sin contacto entre ambos líderes.

Su presencia en el encuentro, convalidada por el Presidente, también dio de qué hablar sobre la posibilidad de que en la mesa se discutan futuros cambios en el diseño de gestión, en colaboración del espacio amarillo. Si bien todavía el acercamiento es prematuro, el propio Milei reconoció en una entrevista televisiva que el contexto lo llevará a "recalibrar el Gabinete para que mantenga el equilibrio" después de las elecciones.

"Lo que sucede ahora es que es muy compacto y todos trabajan muy bien juntos. Entonces, lo que yo tengo que volver a hacer es crear otro equipo que tenga esta compacidad", consideró. Ya de por sí hay dos sillas vacías que deberá reemplazar: la de Seguridad y Defensa, ya que los titulares actuales, Patricia Bullrich y Luis Petri, son cabeza de lista para el 26 de octubre.

Pero, según le precisaron fuentes amarillas a este medio, al macrismo le interesan los sectores vinculados a Obras Públicas, Transporte y empresas públicas. De todos modos, ningún ministerio está fuera de la mesa. "El tema son las condiciones", dijeron en cuanto a que al PRO le interesaría mantener cierta autonomía dentro de la gestión: "Nosotros queremos meter a nuestra gente y no estar pensando en que nos van a echar por decir cualquier cosa".

Los frutos recién se están sembrando, pero los gestos ya se anticipaban hace días. El ministro coordinador había dado un primer guiño para con el líder del PRO la semana pasada, mientras el jefe de Estado se encontraba en Nueva York, Estados Unidos, de donde se llevó el anunciado acuerdo económico con el gobierno norteamericano.

"Mantuve un cordial intercambio con el expresidente en el marco de la buena relación que nos une", resaltó Francos en una publicación de X en la que se muestra sonriente mientras le da la mano a Macri, en el marco del 95° aniversario de la unificación del Reino de Arabia Saudita.

La foto fue dos días después de que Macri reuniera a los candidatos del PRO en la sede de Balcarce 412. "Hace más de un año que no hablamos ni lo veo, pero yo siempre a disposición de ayudar a que este país encuentre el rumbo", le dijo a la prensa a la salida de la sede partidaria.

"Macri tiró un anzuelo y Milei picó", interpretó un referente del espacio amarillo en diálogo con este diario. Efectivamente, el primer mandatario no tardó en acercarse nuevamente a Macri mediante chats de Whatsapp desde Nueva York. Como antesala, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, le pidió a Milei que trabaje en la gobernabilidad.

Pero fue en realidad Francos, a quien Milei le encomendó la tarea de tender puentes con los demás sectores políticos, el que materializó la reunión con Macri apenas el Presidente llegó del país norteamericano. Desde el Gobierno destacaron que el ministro hace semanas que venía dando señales de acercamiento al destacar la colaboración del PRO en el Congreso y que su estrecha relación personal con Macri data desde hace tiempo.

La reunión duró alrededor de tres horas, según precisaron las fuentes. "Es bueno haber retomado el diálogo después de más de un año, siempre con la misma vocación: decirle la verdad al Presidente sobre lo que pienso de la situación del país y encontrar las oportunidades para trabajar para que la Argentina salga adelante", definió en tono crítico el exmandatario en X.

Por su parte, el Presidente consideró, en una entrevista en A24: "A partir de ahí retomamos el diálogo y estamos trabajando en recomponerlo. La verdad es que nos llevamos muy bien, por más que un año no hablamos". Según trascendió, está interesado en concretar una segunda reunión en los próximos días.

Este miércoles hubo otro acercamiento de Francos, esta vez con Jorge Macri, el jefe de Gobierno porteño. En la Casa Rosada destacaron que esa foto fue un gesto del alcalde, a quien el presidente Milei le había ignorado el saludo en Catedral Metropolitana durante la celebración del tradicional Tedeum del 25 de Mayo. "Es de los gobernadores aliados el único que no se había reunido ni sacado foto", resaltaron.

En el Gobierno vienen trabajando a fuego lento una reevaluación de la estrategia política, en pos de construir los acuerdos necesarios para que el año que viene avancen las reformas pendientes en el Congreso. Como prioridad se encuentran el Presupuesto 2026, la reforma tributaria y la laboral, que pretenden aterrizar en el recinto durante sesiones extraordinarias después del recambio legislativo.

Independientemente del resultado electoral, el Gobierno necesitará de consensos con los gobernadores para poder aprobarlas. Desde la cúpula analizan, en este sentido, cambios más profundos de gestión que podrían implicar modificaciones en el seno del Gabinete.

Desde el PRO, como ya contó El Cronista, no quieren imponer nombres y cargos, como sucedió en aquel Pacto de Acassuso. "Javier fue el que le pidió a Macri gente y sacó 442 nombres. Karina pensó que Macri le quería comer el Gobierno", interpretan como error. "El problema siempre lo tuvo el Gobierno", agregan.

La interna entre el asesor presidencial, Santiago Caputo, y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, florece especialmente en cómo diagramar este giro estratégico.

Por ahora, en el espacio amarillo prima la desconfianza. "Hay que ver si la relación fluye", consideraron fuentes del PRO. La intención sería abrir el Gabinete para incluir a otros sectores en lo que definen como "un acuerdo por personas, no por partidos", pero todo se encuentra aún muy prematuro como para tener una definición de por dónde irá el rumbo.