

“Le digo al señor Milani, no me maten”. La diputada Elisa Carrió volvió a apuntar contra el Gobierno y en particular contra el jefe del Ejército, César Milani, por la trama detrás de la muerte de Alberto Nisman y dejó en claro que piensa que ella misma corre riesgo tras haber denunciado al Ejecutivo por presunto encubrimiento en la investigación de la muerte del fiscal de la causa AMIA.
En una seguidilla de virulentas críticas al Gobierno, Carrió se quejó de que la presidenta Cristina Kirchner “está bailando sobre el cadver de Nisman” y acusó al secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, a quien calificó como “criminal”, de “manejar” la causa que investiga la muerte del fiscal federal.
En declaraciones al canal Todo Noticias (TN) y a radio Mitre, también cargó contra la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carb, quien, a su entender debería “estar presa”.
Carrió adelantó además que recusará al juez federal Norberto Oyarbide, luego de que recayera en su juzgado la causa por la denuncia que presentó contra funcionarios del gobierno nacional, a quienes consideró responsables por el encubrimiento de la muerte del fiscal Alberto Nisman.
“Vaya casualidad, la causa cayó en el juzgado de Oyarbide, empleado directo de la Policía Federal y del criminal Aníbal Fernández”, cuestionó la legisladora.
La diputada describió a Oyarbide como el juez “más corrupto de la Nación” y aseguró que es “un empleado de los negocios oscuros del poder”.
La diputada dijo que participará de la marcha que los fiscales encabezarán el próximo 18 de febrero para reclamar el esclarecimiento del caso.












