La Cámara de Diputados también aprobó y giró al Senado el proyecto de ley que prorroga por un año más el impuesto al precio final de venta de cigarrillos. El proyecto fue aprobado por 137 votos afirmativos y 48 negativos.

El kirchnerista Fabián Ríos defendió la iniciativa, al afirmar que se entraría en una contradicción si se aprueba por un lado el Presupuesto y no se hace lo propio con las fuentes de financiamiento. También descartó que el contrabando se haya incrementado en su momento, cuando se pasó de una alícuota del 7% a 21%, al tiempo que indicó que en ese período las tabacaleras nunca han disminuido la cantidad de paquetes vendidos.

En algún momento de la historia habrá que analizar influencia de la baja de los impuestos en el gasto en el sistema de salud, advirtió y añadió que la recaudación del impuesto en cigarrillos representa el 25% de incremento en el gasto de salud para afrontar patologías generadas por el cigarrillo.

El radical jujeño Miguel Giubergia, oriundo de una provincia tabacalera, indicó que en su distrito esa industria es la principal fuente de trabajo privado y rechazó los argumentos de Ríos acerca de que incrementar en un 21% el impuesto al precio final de venta de cigarrillo no trae consecuencias sociales, como la pérdida de fuentes de trabajo.

En el 2000, el contrabando fundamentalmente terminó destruyendo los puestos de trabajo y, especialmente, al fondo especial del tabaco, con que se financia la actividad, aseguró. El proyecto, surgido del mensaje 2216 del 14 de noviembre de 2012 del Poder Ejecutivo, prorroga hasta el 31 de diciembre de 2013 inclusive, la vigencia del impuesto adicional de emergencia sobre el precio final de venta de cigarrillos establecido por la ley 24.625.

De acuerdo con los datos suministrados, por ese impuesto en 2011 se recaudaron alrededor de $ 999 millones, en 2012 se estiman en $ 1200 millones la que se podrá recaudar, y para 2013 unos

$ 1.500 millones.