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El retorno de Daniel Alberto Passarella a Núñez, doce años después de decretarse el primer y único descenso en la historia, sigue fomentando el debate en River. Sin ir más lejos Norberto Alonso, uno de los máximos ídolos de la institución, disparó con munición gruesa contra el ex presidente: "Yo no quería salir a la cancha con él", manifestó sin temor a posibles represalias.
Pocas veces antes hubo tanta controversia por un tema puntual en el Millonario. Este domingo recibió a Argentinos Juniors y prácticamente nadie habló de cuestiones tácticas en la previa, contemplando que sólo se generó debate por el regreso del Káiser al Estadio Monumental. Y si bien había opiniones diversas, reinó el respeto: no pasó sobresaltos en el homenaje que tuvieron los campeones del Mundo en Argentina 78, México 86 y Qatar 22.
El zaguero central que fue capitán de la Albiceleste fue quien le entregó a Norberto Ayala, uno de los ayudantes deLionel Scaloni en el último certamen, una medalla de reconocimiento junto a Ubaldo Matildo Filliol, quien ganó el Mundial de 1978 y fue una gloria del arco riverplatense.
La carrera de Passarella en el deporte más popular del mundo fue decreciente. Como futbolista fue uno de los mejores defensores de la historia y figura entre los máximos emblemas del Millo; como entrenador dejó una buena impresión y como mandamás su apellido figura entre las páginas más tristes del conjunto de Núñez.
Al encontrar tantas variables, los hinchas que peinan canas querían respetarlo y los más jóvenes -que sólo vivieron la pérdida de categoría- preferían hostigarlo debido a que aún no olvidan su gestión.
Alonso puso el grito en el cielo
Quien no pasó desapercibido fue el Beto, quien repartó bombas hacia todos los sectores y se mostró en desacuerdo con su presencia. "Yo no me hablo con Passarella, no tengo relación. Él me invitó cuando hacía campaña para presidente y le dije que no. Sabía que por su soberbia algo le iba a pasar a River. Ayer me vino a hablar. No quería salir con él a la cancha", inició su relato en diálogo con D Sports Radio.
Y de inmediato agregó: "No quería poner incómoda a la gente que estaba alrededor. No se negocia con los que le hicieron tanto daño a River. Yo sé lo que pasa en la calle, la gente no lo quiere. Cuando la gente te abrió las puertas del Monumental y vos los traicionaste, no hay vuelta atrás".
Luego, el ídolo de River mantuvo palabras de elogio para las obras que se realizaron en el recinto y para el entrenador Martín Demichelis: "El estadio de River es una cosa impresionante. Es un orgullo para los hinchas. Para mi es el mejor estadio del mundo. Esperemos que a Martin (Demichelis) le vaya bien. Tiene bajo perfil, es educado, es trabajador y es uno de los chicos nacidos en River".
