
El uso incorrecto de las semillas de lino puede afectar su capacidad para mejorar la digestión.
Para aprovechar al máximo sus beneficios, es clave conocer los errores más comunes al tomarlas y cómo incorporarlas de manera adecuada en la alimentación diaria.
Entre los errores más comunes, están:
- No molerlas
- No almacenarlas de forma correcta
- No consumir suficiente agua
- Tomar de una sola vez demasiadas semillas de lino
Consumirlas de forma correcta permite obtener sus nutrientes y favorecer la salud a largo plazo sin afectar tu bienestar intestinal.
Los errores más comunes de usar semillas de lino y cómo tomarlas correctamente para mejorar la digestión
La dietista nutricionista Belén Rodríguez reveló los errores más comunes de usar las semillas de lino, según el portal de We Life. Además, especificó cómo se tienen que tomar de forma correcta para mejorar la digestión.
Uno de los errores más frecuentes al consumir semillas de lino es no molerlas antes de ingerirlas. Si las consumís enteras, es probable que tu cuerpo no pueda absorber sus nutrientes. Lo ideal es molerlas justo antes de consumirlas para aprovechar al máximo sus propiedades.

Otro error habitual es almacenarlas de forma incorrecta. Las semillas de lino molidas deben guardarse en un recipiente hermético en el congelador, ya que son propensas a oxidarse rápidamente debido a su contenido de grasas omega-3, lo que las puede hacer perder nutrientes y volverse rancias.
Además, no aumentar la ingesta de agua al consumirlas puede generar malestar digestivo. Las semillas de lino son ricas en fibra soluble, que necesita agua para expandirse y facilitar el tránsito intestinal. Sin suficiente agua, pueden provocar estreñimiento en lugar de mejorar la digestión.
Finalmente, el consumo excesivo también es un problema. La experta recomienda empezar con una cucharada diaria e ir aumentando de forma gradual. Consumir grandes cantidades de golpe puede causar malestar digestivo o interferir con la absorción de ciertos medicamentos.

Los beneficios a largo plazo de las semillas de lino
Es importante tener expectativas realistas al incorporar semillas de lino en tu dieta. Belén Rodríguez subraya que no se trata de un superalimento que genere cambios inmediatos.
Incluirlas de manera moderada en una alimentación equilibrada es fundamental para aprovechar sus propiedades. Si seguís estas recomendaciones, podrás beneficiarte de las propiedades de las semillas de lino:
- Ricas en Omega-3: excelente fuente de ácidos grasos omega-3, que favorecen la salud cardiovascular.
- Altas en fibra: mejoran la digestión, pueden ayudar en la pérdida de peso y contribuyen al control del azúcar en sangre.
- Antioxidantes: contienen lignanos, fitoestrógenos que pueden reducir el riesgo de cáncer y mejorar el equilibrio hormonal.
- Proteína vegetal: aportan proteínas vegetales, lo que las hace ideales para dietas veganas o vegetarianas.


















